Decenas de miles de personas protestaron este domingo contra la ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD), segunda fuerza en las encuestas de intención de voto, para defender la democracia y la cohesión de la sociedad, a una semana de los comicios legislativos alemanes. Unos 30 mil manifestantes, según la policía, y 38 mil según los organizadores, acudieron a la manifestación convocada por Amnistía Internacional (AI) y otras organizaciones de la sociedad civil bajo los lemas "Nosotros Somos El Cordón Sanitario" y "Valentía Humanidad Unidos".
"Ataque feroz" a la democracia
El cantante alemán Herbert Grönemeyer, y el batería del grupo 'Die Ärzte" (Los médicos), Bela B, actuaron en la manifestación. En su discurso, el primero se pronunció a favor de una Alemania abierta y amable con la inmigración, ante el endurecimiento de las posturas que marcan la campaña electoral y que llevó a los conservadores incluso a aprobar una moción en el Parlamento por primera vez con el apoyo de la AfD.
"Nuestra democracia sufre un ataque feroz. Votemos a un partido democrático", instó Grönemeyer a los ciudadanos. Las organizaciones de la sociedad civil que convocaron la concentración critican la "normalización de la política y el discurso de extrema derecha" y el "fortalecimiento de la extrema derecha en Alemania y Europa".
Los discursos se dirigieron contra la ultraderechista AfD así como contra la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU), favorita en las encuestas, por haber roto un tabú al haber agrietado en el Parlamento el cordón sanitario impuesto por los partidos tradicionales a la ultraderecha. Los partidos democráticos no quieren cooperar con AfD en ninguna cuestión, algo que la CDU ignoró en la Cámara Baja con tal de endurecer la política migratoria en Alemania tras una serie de ataques por parte de solicitantes de asilo en los últimos meses.
Julia Duchrow, secretaria general de Amnistía Internacional en Alemania, dijo que los manifestantes salieron a la calle "para defender la base de nuestra convivencia: los derechos humanos". "Nos oponemos resueltamente a quienes quieren excluir a la gente, a quienes quieren dividir el mundo entre 'nosotros' y 'los otros', y decimos claramente: los derechos humanos se aplican a todos. Y quienes violan los derechos de unos violan los derechos de todos", señaló Duchrow.
En las últimas semanas miles de personas se manifestaron en toda Alemania contra la radicalización de los conservadores. El sábado también hubo manifestaciones contra el extremismo en varias ciudades. Según la cadena Hessischer Rundfunk, 15 mil personas se reunieron en Frankfurt del Meno y según la policía unas 13 mil solo el sábado en Düsseldorf.
Las injerencias "inaceptables" de Vance
Hasta el vicepresidente de EE.UU., JD Vance, se metió en la campaña electoral alemana con un polémico discurso en el que abogó por eliminar el cordón sanitario a la ultraderecha germana y criticó la supuesta merma de la libertad de expresión en Europa. El canciller alemán, Olaf Scholz, respondió a la mano derecha de Donald Trump remarcando que su país no aceptará de ninguna manera que extranjeros y mucho menos aliados y amigos se entrometan en la democracia y las elecciones germanas del próximo 23 de febrero.
"AfD es un partido, que, desde sus filas trivializa como 'cagada de pájaro' de la historia alemana el nacionalsocialismo y sus monstruosos crímenes -crímenes contra la humanidad, como los cometidos en Dachau", señaló Scholz en su discurso del sábado en la Conferencia de Seguridad de Munich. El canciller recordó que Vance había visitado el día antes de su discurso precisamente ese campo de concentración al noroeste de Munich, donde afirmó que este terrible lugar (donde murieron al menos 41.500 personas de hambre, enfermedades, torturas, asesinatos y las consecuencias del encarcelamiento) recuerda a todos por qué "debemos trabajar para que esto no vuelva a ocurrir".
Por lo tanto, subrayó Scholz, el compromiso con el "¡Nunca más!" no es compatible con el apoyo a la AfD, y "por eso no aceptaremos que extraños intervengan en nuestra democracia, en nuestras elecciones y en la formación de opinión democrática a favor de este partido". Es en Europa, según el vicepresidente de EE.UU., donde está amenazada la libertad de opinión e incluso la democracia por una presunta marginación que sufren "partidos populistas de izquierda y derecha" con "puntos de vista alternativos".
Vance criticó la anulación de las elecciones presidenciales en Rumania tras el triunfo del ultraderechista Calin Georgescu por una presunta injerencia rusa y el hecho de que los diputados de la ultraderechista AfD no hubieran sido invitados a la Conferencia de Seguridad. También aseguró que en una democracia no debía haber lugar para un "cordón sanitario", en clara alusión al hecho de que los partidos democráticos alemanes se hayan negado hasta ahora a cooperar con la AfD por detrás de los conservadores.