El final del semestre de River no tiene el brillo que se esperaba. A la eliminación de la Copa Libertadores a manos de Lanús, el equipo de Núñez sumó algunos malos resultados que lo dejaron muy lejos de los líderes de la Superliga (Boca y San Lorenzo le llevan 12 puntos, que podrían estirarse a 15 si el Xeneize vence el domingo a Estudiantes), justo en la antesala de la final de la Copa Argentina, cuya conquista pasó a ser prioritaria para el plantel millonario. De cara a ese partido ante Atlético Tucumán (en Mendoza, el sábado, a las 19.15), Marcelo Gallardo deberá trabajar para que el equipo y las individualidades superen los bajos rendimientos que se observaron en las caídas ante Newell’s y Gimnasia.
Las dudas de River arrancan en el arco. Enrique Bologna –quien le arrebató el puesto a Germán Lux, sin que hubiera una chance más para Augusto Batalla– atajó pelotas importantes pero ya lleva 6 goles en contra en los 4 partidos que jugó desde aquel cotejo frente a Independiente.
No son menos los problemas en la última línea, aunque la buena noticia para el Muñeco es que podría contar con Jorge Moreira. El lateral paraguayo volvió a jugar en reserva tras un mes de ausencia por un desgarro y se presenta como alternativa de Milton Casco.
Entre los volantes, Gallardo va a seguir de cerca la recuperación de Enzo Pérez, quien tiene un desgarro y hará todo lo posible para jugar, mientras que suma la alternativa de Ariel Rojas, quien estuvo en el banco de suplentes tras unas semanas afuera por lesión muscular. La idea del doble cinco que utilizó con Iván Rossi y Leonardo Ponzio ante Gimnasia no le dio al equipo seguridad defensiva ni equilibrio, por lo que –en caso de recuperarse Pérez– el equipo regresaría a un esquema con más jugadores de gestación.
Por otro lado, seguirán los ensayos tácticos para encontrar al acompañante de Ignacio Scocco, quien con 14 goles es uno de los pocos jugadores del equipo que logró rendirle al entrenador en un semestre de resultados adversos. Los jugadores que hicieron dupla ofensiva con el goleador, sin afirmarse, fueron: Lucas Alario en 2 partidos hasta su partida hacia el fútbol alemán; Carlos Auzqui en 6 partidos, Gonzalo Martínez en 3 cotejos, Rafael Borré en 5 ocasiones y finalmente Nicolás De la Cruz en 1 partido.
Las complicaciones de Gallardo para encontrar un equipo base se evidencian en el hecho de que le dio oportunidades a los 23 jugadores que tuvo a mano, incluyendo a los tres arqueros del plantel, y en que tuvo que darle minutos a 7 jugadores de la reserva. Por causas de fuerza mayor, no sumaron minutos en el semestre Lucas Martínez Quarta y Camilo Mayada, sancionados por doping; Luciano Lollo, Marcelo Larrondo y Rodrigo Mora, lesionados.
El equipo de Gallardo, que siempre sumó alguna conquista en cada uno de los semestres desde su llegada a River en la segunda mitad de 2014, podría mantener esa buena costumbre si logra por segundo año consecutivo la obtención de la Copa Argentina 2017.