Para la Casa Rosada no fue un lunes más. Después de un fin de semana en el que todas las miradas estuvieron puestas en el presidente Javier Milei por la estafa multimillonaria con criptomonedas que lo tuvo como protagonista, la jornada estuvo cargada de reuniones en los despachos de Balcarce 50. El ministro de Economía Luis Caputo cruzó en varias ocasiones desde el palacio de Hacienda a la Casa Rosada para ver al asesor Santiago Caputo, también estuvo el viceministro de Justicia Sebastián Amerio asesorando a los funcionarios para que digan que "no hubo ningún delito", y Milei --además de seguir compartiendo tuits, como un instructivo para comprar $LIBRA,-- también tuvo tiempo de recibir a un senador estadounidense y grabar una entrevista televisiva en la que hizo su primer descargo tras el escándalo.
El mandatario ingresó a su despacho a las 9.45 para esperar la apertura de los mercados y grabar la entrevista que se emitió después de las 20. A las 11.30 ingresó por el salón de los Bustos el ministro de Economía, Luis "Toto" Caputo, pero no se dirigió al despacho presidencial, sino a la oficina en el salón Martín Fierro que usa el asesor sin cargo Santiago Caputo. "No voy a hacer declaraciones", dijo a la prensa cuando entró. A la salida, confirmó que no se había visto con Milei y que se dirigía al ministerio. Horas más tarde, pasadas las 15, volvió a la Casa Rosada cuando Milei estaba grabando la entrevista televisiva. En la filmación estuvo acompañado por Santiago Caputo y por Manuel Adorni, quien suspendió su conferencia de prensa habitual: el vocero figura en los registros de audiencias oficiales como parte de las reuniones entre Milei y su hermana Karina con los personajes principales de la estafa y optó por no someterse a las preguntas de la prensa.
En el entorno del Jefe de Estado decidieron seguir insistiendo con la versión de que el Presidente fue estafado. "El principal estafado fue él", repiten por los pasillos de Balcarce 50 y buscan quitarle todo tipo de responsabilidad: "Poner el link no induce a que la gente aporte", argumentan. Dicen que el mandatario "creyó en el proyecto", y que dejó el mensaje fijado por casi cinco horas porque "estaba ocupado", y "no vio lo que estaba pasando", pero que "frente a los cuestionamientos por las dudas decidió no seguir difundiéndolo".
La oposición, mientras tanto, avanzará este lunes en el pedido de juicio político al presidente y desde el gobierno dicen que "agradecen" eso y buscan correr el eje de la discusión polarizando con el kirchnerismo. Dicen que tendrán dos líneas de acción: por un lado una línea "política", "seguramente Milei va a reconocer el error, pedir perdón y vamos a tener que cortar una cabeza", que, opinan, puede llegar a ser la de Mauricio Novelli. Por ahora, eso no pasó. Además, suman en la "línea política", criticar "al kirchnerismo", por "buscar hacerle juicio político al Presidente". Por el otro lado, argumentan que irán por la "línea judicial", y que allí "van a colaborar para que la Justicia investigue y averigüe qué delitos se cometieron".
Con la mirada puesta en Estados Unidos
Antes de grabar la entrevista que salió al aire anoche, Milei estuvo en su despacho con el senador republicano de Estados Unidos Steve Daines y la comitiva que lo acompaña en su visita a la Argentina. La Oficina del Presidente difundió la imagen, e incluyó una motosierra en la mesa en la que se dio el encuentro, como para dar la imagen de que el mandatario sigue con su agenda de manera habitual. Según cuentan en el gobierno ese encuentro fue para organizar el viaje a Estados Unidos que Milei emprenderá el jueves por la madrugada.
Los distintos funcionarios que deben cuidar la firma del Presidente decían que no podían hacerse cargo de lo que él escribe en twitter y que se enteraron de los acontecimientos por los medios. Aseguran que tampoco los llamó de manera posterior para ver cómo avanzar. El que sí estuvo asesorando a distintos funcionarios e integrantes del gabinete fue el viceministro de Justicia y hombre de Santiago Caputo, Sebastián Amerio. Él bajó línea de lo que tenían que decir y argumentar en lo vinculado a lo legal: "No hubo delito"; "obró de buena fe", "no sabía que se trataba de un fraude", les repitió como un mantra a los laderos del Presidente.
Por otro lado, en los pasillos de Balcarce 50 se lavaban las manos y le atribuían toda la responsabilidad al propio Jefe de Estado: "esta es toda de él", marcaban y agregaban que "se equivocó y esperamos que pida perdón". También subrayaban que Milei "no entiende nada de criptomonedas", que no saben quién fue la persona que lo vinculó con los traders, y marcaban una diferencia: "él promocionó el proyecto, no la moneda".
Los famosos cien millones
Según confían en su círculo íntimo, en las reuniones que Milei tuvo con Hayden Mark Davis, fundador de Kelsier empresa que impulsó la criptomoneda $LIBRA, y con los representantes de KIP Protocol en Argentina, Mauricio Novellli y Julian Peh, le dijeron a Milei que el proyecto era para juntar "fondos para emprendimientos argentinos", vinculados a "microcréditos", y que por eso él lo quiso compartir. En esa línea, intentan justificar la estafa y señalan que: "la plata la tienen ellos. Si agarran 100 millones de dólares y llevan adelante el emprendimiento le cierran la boca a todos y no hay delito. Lo que pase con la moneda es otra historia, son cosas distintas".
El fin de semana Milei intentó hacer como si nada ocurriera y estuvo en la Quinta de Olivos escuchando ópera con sus perros y con el economista Juan Carlos de Pablo. Su hermana Karina, sin embargo, dicen que estaba enojada y que ella es quien "lo suele poner en caja". Opinan que el intento de vincular a la secretaria general de la presidencia con la estafa "es una operación de los primos Macri", y que ella "no entiende nada de ese tema y nunca se metería". El Presidente, dicen, "está confiado de que fue un error y de que no va a pasar nada en los mercados". Además, cuentan que "Milei cree que todo esto es una movida del círculo rojo para tratar de afectarlo".
El Presidente conocía a Novelli desde hace mucho más de cuatro años e, incluso, daba clases en una "escuela de negocios" que él tenía y Milei publicitaba. Creen que el Presidente puede apuntar a él para pagar los costos y agregan: "Los de las cripto son todos chantas". En el oficialismo, como si no existieran todas las reuniones y encuentros que Milei tuvo con los traders, esbozan un intento de falsa autocrítica: "él (por Milei) dijo que va a tener más cuidado con quienes recibe y que va a permitir que haya más filtros".
Prenderle velas a Trump
En la casa de Gobierno son optimistas y creen que, si bien ahora el centro está tomado por el escándalo, el jueves o el viernes podrán instalar "otro tema en la agenda". Confían que el viaje a Estados Unidos del Presidente les dará aire y dicen que el canciller Gerardo Werthein insiste en conseguir una bilateral con Trump, más allá del encuentro en la CPAC. "Nos serviría mucho esa foto", subrayan. Mientras tanto, Milei le daba rt y compartía como un triunfo un posteo con una frase de él que publicó Trump en una de sus redes sociales.
"Con Trump no pasa nada, él incluso publicitó su propia moneda... el viaje sigue todo igual", aseguraban en su entorno. También desestimaron la baja que hubo en los mercados. "No pasó nada. Vienen cayendo todos los días, tres puntos no es nada", repetían buscando tapar la situación y decían que, por más que fue feriado en Estados Unidos, lo importante es que "solo hubo tres puntos de caída hoy, que era el día importante porque son los inversores argentinos, los que están empapados en el tema".