El Ejecutivo nacional avanzó con la desregulación del sistema de salud, a partir de la autorización de aumentos diferenciados en las tarifas de las prepagas, de acuerdo al tipo de plan que contrataron los afiliados. Las compañías deberán informar los incrementos con 30 días de antelación.
La nueva norma ratificó que las las empresas de medicina privada “podrán establecer libremente los valores de las cuotas”, con el objetivo de fomentar la competencia en el mercado y provocar "la baja de precios". Además, "el porcentaje de ajuste podrá variar según las características específicas de cada plan de salud que comercialicen”.
Desde este lunes, las prepagas tendrán la libertad de desplegar distintos tipos de aumentos en los planes de salud que comercializan, según lo establecido en el decreto 102 del Boletín Oficial.
Aumentos
El decreto elimina la restricción que obligaba a las entidades de medicina prepaga a aplicar aumentos proporcionales a todos los afiliados por igual, sin distinguir el listado de prestadores y las prácticas cubiertas por arriba del Plan Médico Obligatorio (PMO).
Por ley, las empresas deberán informar a los usuarios los ajustes en las tarifas con dos detalles resaltados: porcentaje de variación y valor mensual de la cuota. Para comunicarlo, la norma contempla el plazo dentro de los cinco días posteriores a la publicación del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec y con al menos 30 días de anticipación al cobro de la nueva cuota. La idea del oficialismo es que si se anticipa la comunicación del aumento, se mitiga el impacto.
En diciembre de 2023, con el DNU 70, el gobierno de Javier Milei liberó las subas de las prepagas, que hasta entonces estaban sujetas a la aprobación de las autoridades del área.
La iniciativa provocó importantes ajustes al alza en el servicio de salud privado. Fue uno de los que más se incrementó en 2024, con subas promedio anual de 124 por ciento.
Dos meses después, el decreto reglamentario 171 determinó la imposibilidad de diferenciar los aumentos entre los contratos vendidos por una misma entidad.
Personas mayores
La modificación en la política de precios del sector mantiene la reglamentación sobre que las cuotas de los planes para las personas de mayor edad no podrán superar el triple del precio que tengan los contratos para el grupo de los más jóvenes.
También estipuló que no puede rechazarse a personas en razón de su edad. Los planes para la última franja etaria deberán estar disponibles sin límites de edad máxima, “ya sea para la admisibilidad de nuevos usuarios o la permanencia de los existentes”.
Competencia
El Gobierno nacional intenta ahora que haya más competencia en el mercado, impulsada por las estrategias para fijar precios.
Considera, a partir de un replanteo, que el impedimento de diferenciar los precios establecido en 2024 perjudica a los usuarios de planes más económicos, porque "terminan financiando a los más caros”.
Este año comenzó con una medida central para el sector como la eliminación de la triangulación de los aportes a través de las obras sociales, requisito necesario para derivar los fondos a las empresas de medicina privada.
Con la cancelación de esa intermediación, el Ejecutivo confía en que las prepagas van a bajar las cuotas porque no tendrán que afrontar ese costo. De acuerdo a información extraoficial, las compañías reducirían sus tarifas entre 2 y 3 por ciento.
Ante la caída masiva de afiliados, distintos sindicatos preparan presentaciones judiciales de forma individual en contra de la resolución 1/2025 de la Superintendencia de Servicios de Salud que puso fin a la triangulación.