La 38ª Cumbre de la Unión Africana giró en torno a la justicia reparativa y la sanación racial, bajo el lema “Justicia para los africanos y los afrodescendientes a través de reparaciones”. Los líderes del continente reafirmaron su compromiso con la superación del legado del colonialismo y la esclavitud, entendiendo que “la búsqueda constante de la justicia y la equidad” requiere de la atención y acción colectiva coordinada de todos los y las africanas y de los afrodescendientes en una lucha que “trasciende lo histórico” para hacerse carne en el “tejido actual de nuestras sociedades”.
En su discurso inaugural, el primer ministro etíope, Abiy Ahmed, enfatizó que las reparaciones no son un gesto simbólico ni un acto de caridad, sino un derecho histórico que busca restaurar la dignidad, combatir la pobreza y desmantelar las estructuras de desigualdad que siguen vigentes. “Las heridas del colonialismo y la esclavitud no se han cerrado. La explotación de nuestros recursos, de nuestra gente y de nuestras oportunidades continúa bajo nuevas formas. Esta cumbre exige el fin de ese saqueo sistemático y la construcción de un futuro basado en la justicia”, declaró Ahmed ante los jefes de Estado y de Gobierno de la UA.
Uno de los puntos clave de la cumbre fue la discusión sobre los mecanismos concretos para avanzar en el proceso de reparaciones. Entre las propuestas, se destacaron la creación de un fondo continental financiado con aportes de antiguas potencias coloniales, la demanda de cancelación de deudas externas consideradas ilegítimas y la exigencia de compensaciones económicas y tecnológicas por los siglos de expoliación. Además, se reiteró la necesidad de fortalecer la coordinación con la Diáspora africana y los movimientos afrodescendientes que también luchan por justicia reparativa en las Américas y el Caribe y Europa.
El llamado a la acción de la UA incluyó críticas a las corporaciones multinacionales que continúan extrayendo riqueza de África sin devolver beneficios equitativos a las comunidades locales. “Nuestro continente sigue siendo visto como una fuente inagotable de recursos baratos, pero eso debe terminar. No estamos pidiendo favores; exigimos lo que nos corresponde por derecho”, afirmó Moussa Faki Mahamat, ex primer ministro de Chad y actual presidente de la Comisión de la UA.
Durante el desarrollo de la cumbre se precisó que la lucha por las reparaciones no se limita a lo material, sino que se refiere a un “llamado más amplio a la justicia, el reconocimiento y la sanación”. Además, implica una transformación del relato histórico impuesto por las potencias coloniales. En este sentido, se reiteró la necesidad de exigir disculpas formales de los países europeos responsables del colonialismo y la trata transatlántica de esclavos, además de la restitución de artefactos y bienes culturales saqueados.
Sudáfrica, Nigeria y Senegal fueron algunas de las naciones que impulsaron una resolución conjunta instando a la Unión Europea y a organismos internacionales a reconocer su responsabilidad histórica y abrir negociaciones formales sobre reparaciones. “No se trata de reescribir la historia, sino de corregir sus efectos. Las naciones que se enriquecieron con la esclavitud y el colonialismo tienen una obligación moral y económica con África”, sostuvo el presidente sudafricano Cyril Ramaphosa quien hace pocos días mantuvo duros cruces con Donald Trump y Elon Musk.
El encuentro en Addis Abeba reafirmó la voluntad política de los líderes africanos de llevar el tema de las reparaciones al más alto nivel de la diplomacia internacional, consolidando una agenda que, aunque históricamente postergada, hoy cobra más fuerza que nunca. La UA dejó un mensaje claro: hace tiempo que África merece justicia real.
La Cumbre fue, también, un lugar donde reafirmar la posición de la UA con respecto al pueblo palestino, lo que el presidente de la Comisión de la UA definió como la “horrible e injusta guerra que ha destruido todo en Palestina y en particular en Gaza”. Luego de que Sudáfrica presentara una acusación contra Israel por violaciones a la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio en Gaza frente a la Corte Internacional de Justicia (CIJ), la UA se presentó en un procedimiento solicitando a la Corte que se pronunciara sobre el estatus jurídico de la ocupación de los territorios palestinos por parte de Israel. Entonces, el organismo resaltó su obligación de intervenir en aquel procedimiento dado que la mayoría de sus Estados miembro soportaron las mismas injusticias que Palestina: colonialismo, discriminación racial y apartheid. En su 38ª Cumbre, la Unión Africana se mantuvo firme en su defensa del pueblo palestino y denunció el silencio criminal de las potencias mundiales.
*Politóloga UBA.