Un Boca desteñido y de blanco sufrió un duro traspié este martes en Perú al caer 1-0 con Alianza Lima en el partido de ida de la fase 2 de la Copa Libertadores. La revancha será en una semana en La Bombonera.

En un campo rapidísimo, Quevedo aprovechó los resbalones de Barinaga para empezar a darle trabajo a Marchesín. Y en apenas 4 minutos, tras una pelota parada, la defensa xeneize se durmió, Noriega remató, Marchesín alcanzó a manotear, pero en el rebote Ceppelini facturó. De arranque, a Boca se le oscurecía el panorama.  

El equipo de Gago sintió el impacto ante un rival muy enchufado y enfocado en hacer daño a partir del exceso de confianza, la lentitud y los errores de su ilustre convidado, que recién arrimó peligro con un cabezazo defectuoso de Battaglia y un remate de Alarcón desviado por Viscarra.

Boca lucía contenido y le costaba asociarse por falta de precisión, pero sobre todo porque los peruanos le jugaban con dientes apretados. Con un tibio Velasco y Merentiel retrasándose para no quedar absorbido por la marca, Palacio trataba de ser eje. 

Pero la floja performance de la última línea, además de los enormes huecos que dejaban los volantes, eran una invitación para el local, que tuvo una doble chance en los pies de Barcos, aunque enfrente estaba Marchesín, quien enseguida frustró a Castillo. 

El Xeneize había perdido la brújula y Gago se fue al descanso pensando cómo hacer un refresh en los suyos para salir de semejante pesadilla.


Entraron Zeballos y Giménez, y Boca insinuó otra cara. Pero duró un puñado de minutos, porque gradualmente volvió a deshilacharse: Di Lollo la rifó en una salida y Cantero provocó una volada espectacular de Marchesín, la carta heroica y absoluto responsable de que el resultado a esta altura no fuera una catástrofe. 

Por si fuera poco, el árbitro Ostojich debió sacar una segunda amarilla a Noriega -que había ligado la primera a los 20 segundos- por un trancazo al chileno Palacios, que el uruguayo no consideró.

Desconectado, sin carácter ni peso específico, Boca fue una sombra en Perú, el equipo de "Pipo" Gorosito le hizo precio y la serie quedó abierta.