“Me gusta el periodismo libre, sin ediciones”. Tomás Méndez se mete en el ojo de la tormenta de entrada, sin aviso previo, al reflexionar sobre la política, el periodismo y los periodistas en una semana convulsionada, marcada por el escándalo político en el que ha quedado sumergido Javier Milei por la estafa de la criptomoneda $LIBRA, pero también con la polémica entrevista que el Presidente ofreció a Jony Viale. Reflexivo, confía: su próximo proyecto será libre y sin ediciones.

Méndez (48, Córdoba) debuta este jueves en la 750 con “En el ojo de la tormenta”, de lunes a viernes de 13 a 16, acompañado por un equipo de primera línea. “Tengo toda la expectativa, vuelvo a la radio que es el medio que más me gusta y esperamos estar a la altura de las circunstancias”, asegura Méndez, que tiene una larga trayectoria en el periodismo, que incluye la producción y conducción de ADN Periodismo Federal, un programa de investigación emitido en Córdoba desde 2003, donde encaró múltiples investigaciones al poder político y empresarial, lo que le valió amenazas y presiones de todo tipo, que lo llevaron incluso a vivir con custodia a raíz de una serie de publicaciones vinculadas a delitos de narcotráfico por el que acabaron detenidos once policías cordobeses.

“Se viene un año muy movido en lo político, va a hacer falta información, vamos a apuntar a que la gente se pueda enterar de lo que por ahí no se puede enterar si consume otros medios”, cuenta Méndez, en una pausa de sus tareas como productor integral de Telenueve Investiga, el programa que ha destapado varios escándalos de la política y el sector empresariale en El Nueve.

Foto: Gentileza Tomás Méndez.


“Tengo ritmo, vamos a ver cómo estamos ahora a los 48 años (risas). Pero creo que puedo mantener el ritmo durante las tres horas. Ojalá la gente pueda ver que tengo ese ritmo, pero sino me tomaré algunos cafés antes de entrar y largaremos con todo”, dice con ilusión.

Méndez estará acompañado por un gran equipo de primera, con una larga trayectoria en la 750: Flora Alkorta (humor), Guadalupe Regalzi (actualidad), Valmiro Mainetti (locución), Marisú Papaleo (espectáculos), Jorgelina Rocca (deportes) y Christian D'Alessandro (derecho previsional). Además, estarán Laura Medina y Emanuel Herrera en los móviles. 

-¿Qué temas te interesan especialmente?

Me interesan todos los temas. Hoy es preponderante la lectura política de lo que ocurre, también la economía. Vamos a hacer hincapié en eso, consultando a especialistas, tratando de sacar conclusiones para ver para dónde va el país. Uno nunca sabe para dónde va el país, pero vamos a tratar de buscarle la brújula y estar lo más orientados posible.

-Te dedicás al periodismo hace varias décadas, tenés una larga trayectoria especialmente en radio y TV. ¿Qué tipo de periodismo te gusta?

El periodismo libre, sin ediciones. Vamos a tratar de hacer un programa sin ediciones y un periodismo lo más libre posible.

-A partir del escándalo de Milei con la cripto $LIBRA y la posterior entrevista de Jony Viale al Presidente se volvió a instalar la discusión sobre el rol del periodismo y su vínculo con el poder. ¿Qué mirada tenés?

Mi mirada sobre el periodismo es bastante pesimista. A la gente hay que empezar a decirle la verdad, también sobre nuestra profesión. Estamos donde estamos porque evidentemente hubo fallas graves en la política y los dirigentes políticos de todas las extracciones. Hay que ver cuál es la salida real, que todavía no se sabe. Y con el periodismo pasa lo mismo. No sé si la gente consume la verdad, sino refuerzos. Estamos con problemas. Hay que volver al eje indiscutido del periodismo, acercarse lo más posible a la verdad, sin teñirse de cuestiones partidarias ni de sobres.

-Desde Telenueve Denuncia has destapado varias ollas, negocios turbios y publicaste hechos de corrupción que dieron que hablar. ¿Hay lugar para el buen periodismo de investigación en Argentina?

El periodismo de investigación es muy específico, creo que ya no se generan periodistas de investigación. Las facultades y universidades no lo hacen porque creo que se viene lo liviano, superficial y rápido. No sé si la sociedad busca la verdad. Estamos en un gran problema, porque cuando vos tenés poco tiempo para expresar una idea o un contenido, no te permite razonar ni le permite razonar al que está del otro lado. Entonces es cada vez más difícil. El receptor no consume más de 30, 40 segundos de una noticia. Y eso nos pone en problema a todos, pone en jaque al periodismo de investigación. Uno ya no sabe cómo desarrollarlo, porque sobran las pruebas pero hay que explicar de forma rápida y contundente. Y el periodismo de investigación está desapareciendo, porque no se produce para eso, lleva mucho trabajo, mucho laburo, sobre todo en pensar cómo se vuelca la información en TV, radio o donde sea, y tratar de ser atractivo. Porque hacer un periodismo que no se ve, no se escucha y no se lee, no sirve. Creo que hacer periodismo de investigación hoy es un desafío, pero pasa mucho más por el receptor que por el emisor, aunque también estamos en problemas porque no se forman periodistas de investigación, nadie quiere leer expedientes, consultar fuentes, las redes están ganando la batalla. Y sus creadores, ni te cuento.