Javier Milei protagonizó ayer una nuevo escándalo internacional durante su exposición en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en Washington. El Presidente lanzó una catarata de insultos, debido a que su teléfono no paraba de sonar mientras él hablaba. "El que está haciendo esto, sabe que está interrumpiendo la charla", lanzó con furia desde el atril y remató: "Argentina es así, tiene un montón de cabeza de termos que hacen este tipo de cosas". Completamente fuera de eje y sin respetar la investidura de mandatario, el libertario también afirmó que muchos argentinos tienen "excremento" en la cabeza.
El arrebato presidencial se dio en el marco de su novena visita a Estados Unidos, donde Milei participará hoy de una nueva edición de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC). Mientras delimitaba los detalles de su discurso titulado "El modelo económico argentino", el mandatario debió dejar de leer sus escritos para comentar que había un celular sonando. "Ese teléfono está terrible. ¿Es el mío, no?", preguntó entre risas, y luego de que uno de sus colaboradores le respondieran que lo llamaban para molestarlo, el libertario sentenció: "Lo hacen a propósito. Es un imbécil mal nacido".
El auditorio tomó con gracia la escena y luego de reírse del episodio, lo aplaudieron. El aval de los asistentes hizo que el jefe de Estado redoblara la apuesta y recordara el debate presidencial contra el excandidato a presidente, Sergio Massa, en el que cuestionó la presencia de "tosedores" que, según expuso, intentaban arruinar su participación.
"Llaman porque saben que están interrumpiendo la charla. En algunos casos, a esos simpáticos que están tratando de interferir le decimos cabeza de pulpo, que tiene el aparato digestivo en la cabeza, y la tiene llena de excremento", aseveró, y sumó: "Pero bueno, de Argentina se puede esperar cualquier cosa".
Es de público conocimiento la irritabilidad que le genera al mandatario las interrupciones durante sus discursos. En al menos dos ocasiones se quejó de ruidos durante sus entrevistas en vivo, la última hace diez días.
No es la primera vez que lo expone, por lo que considera que sus detractores, al corriente de su malestar, buscaron perturbar su desempeño. Para su tranquilidad, sus colaboradores lograr silenciar el aparato.
Contra la justicia social
Superado el incidente del teléfono, Milei destacó los "logros" del modelo económico argentino. En su intervención, insistió en que el concepto de la "justicia social" es una "aberración". "Argentina era una verdadera catástrofe cuando nosotros llegamos al poder. Argentina estaba claramente debajo del promedio de la tabla", señaló.
Dijo que su administración decidió "sincerar la situación, porque básicamente de esa manera los productos volverían a aparecer en las góndolas". Y señaló que ese sinceramiento implicó "encontrarnos con 57 por ciento de pobres, que es el número registrado en enero del 24. Cuando nosotros llegamos, la inflación venía corriendo a más del 1 por ciento diario y después se aceleró más durante la segunda semana de diciembre".
"Entonces la pregunta es, ¿cómo llegaron a este desastre? Pues el modelo de la casta tiene dos elementos: la idea aberrante de los socialistas de que ‘donde hay una necesidad, nace un derecho’", siguió el jefe de Estado argentino. "La justicia social es una aberración desde el punto de vista moral y naturalmente, como era de esperar, va a generar malos resultados", enfatizó.
Fue el primer discurso que ofreció Milei durante este viaje por Washington, luego de reunirse con el magnate y funcionario estadounidense Elon Musk y la titular del Fondo Monetario, Kristalina Georgieva. A la sede del BID, Milei junto a Karina Milei -secretaria General de la Presidencia-, Luis Caputo -ministro de Economía-, Gerardo Werthein -canciller- y el portavoz Manuel Adorni.
Antes de su exposición, Ilan Goldfajn -titular del BID-, lo presentó en forma elogiosa ante el auditorio de invitados especiales que había convocado. El encuentro fue a puertas cerradas, a pedido del gobierno argentino.
Tras su presentación en el BID, Milei y la comitiva oficial se trasladaron hasta el Banco Mundial. Allí fueron recibidos por su presidente Ajay Banga, que visitará Buenos Aires en abril. Fue una reunión protocolar para fortalecer las relaciones institucionales entre Argentina y el organismo multilateral.
Cuando terminó el encuentro con Banga, a pocas cuadras de la Casa Blanca, Milei regresó a su hotel Maryland y ya no tiene reuniones en su agenda oficial. Hoy a las 13 hs dará un discurso en la Conferencia de Acción Conservadora, donde también participará el presidente Donald Trump. Por la noche partirá en el vuelo que lo traerá de regreso hacia la Ciudad de Buenos Aires.