La tasa de desocupación trepó en el tercer trimestre del año pasado en el aglomerado Gran Santa Fe al 6,7 por ciento y en el Gran Rosario a 5,8 por ciento, en ambos casos por debajo del promedio nacional de los 31 aglomerados urbanos que se ubicó en 6,9 puntos, según el informe sobre mercado de empleo publicado por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). El ingreso medio en la provincia entre julio y septiembre del año pasado fue de 412.965 pesos, con una brecha a favor de los varones del 27,7 por ciento con relación a las mujeres.
El informe publicado por el organismo estadístico nacional revela también que la subocupación (personas que trabajan menos de 35 horas semanales) fue del 15,8% en el Gran Santa Fe durante el tercer trimestre de 2024, mientras que la subocupación demandante (aquellos que buscan emplearse por más horas) fue del 10,4%. En Rosario, esos guarismos fueron del 13 y el 9,2% respectivamente.
El Indec informó que la tasa de empleo en Santa Fe durante el tercer trimestre del 2024 era del 42%, contra un 45,7% registrado en igual período del 2023. En el aglomerado Gran Rosario, en tanto, la tasa de empleo fue del 47,7 puntos en ese mismo período de tiempo.
De acuerdo a los datos oficiales, entre julio y septiembre del año pasado había en la provincia 1.654.000 personas en condiciones de trabajar (población económicamente activa), de las cuales 1.564.000 estaban ocupadas y 90.000 desocupados. Un año atrás, el desempleo afectaba a 81.000 santafesinos, lo que revela que en un año se perdieron 10 mil puestos de trabajo en Santa Fe.
En el universo de los ocupados, hubo 217.000 santafesinos y santafesinas que buscaban activamente otro empleo; mientras que 222.000 ciudadanos trabajaban menos de 35 horas semanas, que es lo que estadísticamente se considera como “subocupado”. Estas cifras crecieron exponencialmente con respecto al tercer trimestre del 2023, cuando la situación afectaba a 111.000 y 117.000 trabajadores, respectivamente.
El diputado del Frente Amplio por la Soberanía (FAS), Carlos Del Frade, señaló ayer que en Santa Fe “casi la tercera parte de la población tiene problemas de empleo: 5,5 por ciento de desocupación, 13,4 por ciento de subocupación y 13,1 por ciento de personas ocupadas demandantes. 90 mil desocupados, 217 mil ocupados demandantes y 222 mil subocupados, un total de 529 mil santafesinas y santafesinos con problemas laborales”.
De acuerdo a los datos oficiales, en el aglomerado Gran Rosario residen 1.355.000 personas, de las cuales 686 conforman la Población Económicamente Activa (PEA, es decir, que están en condiciones de trabajar).
El universo de ocupados, al tercer trimestre de 2024, alcanzaba las 646 mil personas, mientras que los que buscaban pero no tenían empleo eran 39 mil y unas 94 mil tenían trabajos por los que percibían ingresos, pero lo hacían por menos de 35 horas semanales y eran consideradas ocupadas demandantes, atento a que aspiran a desempeñarse laboralmente por más horas. Los que comparten esa condición pero no buscan más, clasificados como subocupados, llegaban entre julio y septiembre pasado a los 89 rosarinos y rosarinas.
Mientras tanto, en otro de los informes difundidos el jueves por el Indec, el organismo dio cuenta que el ingreso medio de un trabajador argentino en el tercer trimestre del año rondó los $619.602. Pero no fue para todos por igual, atento a que la brecha entre haberes de hombres y mujeres fue significativa: mientras que los primeros registraron ingresos medios por $720.852, las mujeres apenas obtuvieron $519.897.
En Santa Fe, el ingreso medio entre julio y septiembre fue más bajo que el promedio nacional. Según el trabajo del Indec, alcanzo en ese período los $413.000, aunque la situación fue dispar también entre varones y mujeres, hay que los primeros promediaron ingresos de $733.375 y las segundas de $530.570, con una brecha del 27,7%.
Del total de asalariados en Santa Fe, 714.000 tuvo descuentos jubilatorios, pero 364.000 no. La brecha de ingresos entre ambos grupos rondó el 61,3%, de acuerdo a las estadísticas oficiales.