La jueza federal de Garantías Mariela Giménez declaró ayer la legalidad de la detención de Roberto Carlos Leiton, también dio por formalizada la investigación penal en su contra, autorizó pericias y dictó su prisión preventiva.

Leiton está siendo investigado como parte de una organización dedicada al narcotráfico que supuestamente lideraban Gustavo Tolaba y su pareja, la modelo e influencer Martina Oliva. Estas dos personas, y otras, fueron detenidas el pasado 5 de febrero, día en el que Leiton consiguió escapar. Anteayer la Policía de Seguridad Aeroportuaria lo detuvo en su casa de la ciudad de Orán. 

La Unidad Fiscal Salta destacó su detención como "Un importante avance" en la investigación penal contra esta organización. 

En la audiencia celebrada ayer la auxiliar fiscal Florencia Altamirano repasó los antecedentes de esta organización, y de la investigación que concluyó con la detención de sus integrantes. 

El caso salió a luz el 5 de febrero pasado, cuando después de tres meses de actuaciones preliminares, un operativo de la PSA derivó en la captura de Tolaba, Oliva y Ángela Cuenca, quienes viajaban en una camioneta Toyota Hilux que fue interceptada en el ex peaje Aunor, en el acceso a la ciudad.

Detrás, en un automóvil Citröen C3, venían Juan Alberto Romero y Roberto Carlos Leitón, quienes al advertir a los policías de Seguridad Aeroportuaria hicieron un giro en “U” y escaparon por la ruta 9/34 hacia la ciudad de General Güemes, seguidos por efectivos de la fuerza de seguridad. 

En plena persecución, los ocupantes del auto comenzaron a arrojar los panes de marihuana por la ventana. El escape siguió por la ruta provincial 112, por la que intentaban llegar a Jujuy, pero a la altura de la finca San Juan de Dios, casi en el límite provincial, abandonaron el vehículo. 

Romero fue detenido en las inmediaciones, pero Leiton logró escapar. Como parte del operativo, ese mismo día fue detenido José Burgos, en un allanamiento llevado a cabo en su domicilio, ubicado en el barrio 17 de Octubre, en la zona norte de la ciudad de Salta, que era el lugar de destino de la marihuana incautada.

Tolaba, Oliva, Cuenca y Romero fueron imputados entonces por "transporte de estupefacientes agravado por el número de intervinientes". A Romero se le sumó el delito de resistencia de la autoridad. Burgos, por su parte, fue acusado por tenencia de estupefacientes con fines de comercialización. Todos quedaron en prisión preventiva.  La investigación estableció que el grupo había realizado más de 30 viajes desde octubre de 2024.

Después de esa audiencia, la investigación siguió y a partir de análisis de sábanas de llamados y de búsqueda en redes sociales identificaraon a Leiton como la persona que viajaba junto a Romero en el Citröen C3.

Ayer la auxiliar fiscal presentó evidencias contra Leiton, entre ellas diálogos que mantuvo con Tolaba en los que hacía referencia al transporte de la marihuana. Altamarino explicó que la droga provenía de Bolivia, y era ingresada al país mediante la modalidad de mochileros. Lluego era acopiada en la casa de Leiton en Orán. La auxiliar fiscal destacó que el interior de la vivienda de Leiton no se condice con el salario que podría reunir el ahora imputado con el trabajo que dijo realizar, de “changarín”.

La auxiliar fiscal imputó a Leiton el delito de transporte de estupefacientes agravado, en concurso real con el de resistencia a la autoridad, y solicitó autorización para avanzar con pericias pendientes y el levantamiento del secreto bancario y bursátil.

La fiscalía reseñó que por cada uno de esos 30 viajes, la organización obtenía ganancias que rozaban los 6 millones de pesos, cantidad que se le secuestró a Burgos en su casa, cuando esperaba para pagar los 15 kilos de droga que estaban transportando los otros ahora acusados cuando fueron detenidos. La marihuana se revendía al menudeo.

La auxiliar fiscal también pidió que Leiton quedara en prisión preventiva. Además de la organización para el transporte, el daño a la salud pública representado por la cantidad de droga incautada y la reiteración de estos transportes, añadió la fuga de Leiton, que incluso se deshizo de su teléfono celular, que ya estaba intervenido. Si bien adquirió uno nuevo, también este fue identificado por los investigadores y a través de él lograron ubicarlo en su casa, donde lo detuvieron.