Países Bajos anunció recientemente la devolución de 119 piezas conocidas como los Bronces de Benín a Nigeria, marcando un hito en el proceso de restitución de bienes culturales expoliados durante la era colonial. Estos artefactos, que incluyen placas de bronce, esculturas y ornamentos personales, fueron saqueados en 1897 por las tropas británicas durante la invasión al Reino de Benín, hoy parte de Nigeria, y posteriormente vendidos en el mercado europeo del arte. Más de un siglo después, regresan a su lugar de origen.
En septiembre de 2022, la Comisión Nacional de Museos y Monumentos de Nigeria presentó el pedido de restitución de los Bronces al gobierno de Países Bajos. El Comité de colecciones coloniales, que se encarga de revisar los pedidos de restitución de bienes culturales robados de su lugar de origen durante el dominio colonial neerlandés, publicó su informe y recomendaciones en favor de la nación africana. Finalmente, Olugbile Holloway, director general de la Comisión, y el Ministro de educación de Países Bajos, Eppo Bruins, firmaron el acuerdo de transferencia la semana pasada.
Olugbile Holloway celebró la restitución de los Bronces de Benín y expresó su esperanza de que esta acción motive a otras naciones a devolver objetos saqueados. "Es un paso hacia la justicia histórica", declaró Holloway, enfatizando que estos objetos no son meros artefactos de exhibición, sino expresiones vivas de la identidad y la memoria de los pueblos africanos.
En la ciudad de Benín (antigua capital del Reino de Benin), se está construyendo el Museo de Arte de África Occidental (Mowaa), un campus de siete edificios cuya apertura está programada para mayo de 2025. Diseñado por el estudio del arquitecto británico-ghanés Sir David Adjaye, el museo será un espacio de preservación y celebración del arte africano occidental y del acervo cultural africano en general, en un contexto donde los países del continente buscan recuperar el control sobre su patrimonio cultural. Allí Nigeria tiene previsto exhibir la mayor colección de Bronces de Benín que existe hasta el momento.
La decisión del gobierno neerlandés se inscribe en un movimiento global de restitución de patrimonios expoliados, en el que también han participado países como Alemania y Francia, a expensas de un arduo trabajo diplomático por parte de las naciones africanas. De hecho, recientemente, en la 38° Cumbre de la Unión Africana (UA) donde la agenda de reparaciones por el colonialismo y la trata transatlántica de esclavos ocupó un lugar central, los líderes africanos exigieron no sólo la restitución de bienes culturales sino también compensaciones económicas y compromisos tangibles por parte de los países que se enriquecieron a costa de la explotación de África.
*Politóloga UBA.