La Escuela para Animadores, dependiente de la Secretaría de Cultura y Educación de la Municipalidad, cumple 20 años de trabajo ininterrumpidos. Cientos de pibes y pibas pasaron por el aula que funciona en el Espacio Animado de la Isla de los Inventos, a partir de la tarea que coordinan Pablo Rodríguez Jáuregui y Diego Rolle, integrantes de Punto Audiovisual (con funciones en Cine Lumière). La convocatoria para la inscripción online a la nueva promoción, sigue abierta hasta el viernes 07 de marzo, y está disponible junto a toda la información en la página web del Centro Cultural Lumière.
“La Escuela para Animadores de Rosario es un espacio educativo de la Municipalidad de Rosario, funciona desde 2006 en el Espacio Animado de la Isla de los Inventos, y se trata de un curso de 9 meses para 64 dibujantes mayores de 18 años, que quieran aprender el oficio del dibujo animado tradicional asistido por software libre. Desde su fundación, la Escuela se planteó como una continuidad de la experiencia educativa del sótano-taller de Luis Bras, y de la visión del mundo de la animación ‘de autor’, popularizada por el programa televisivo Caloi en su tinta; Caloi, de hecho, es el padrino de la Escuela, y asistió a su inauguración. La EPA es un espacio público de encuentro entre animadores, ilustradores, realizadores audiovisuales, historietistas profesionales de la ciudad, y las nuevas generaciones que quieren aprender el oficio de contar historias mediante personajes dibujados en movimiento”, comenta Pablo Rodríguez Jáuregui a Rosario/12.
“Para los que decidimos dedicarnos a la animación en los años ‘80 y ‘90 fue muy difícil encontrar la bibliografía, la información, y la experiencia sistematizados, para consolidar una tribu a la que pertenecer. La existencia y la continuidad de este espacio público y su articulación con la Cinemateca Municipal y el Cine Lumière, permiten sostener una propuesta de producción y exhibición, que prioriza el registro local y nacional con un gran sentido de deuda de gratitud con los pioneros animadores, quienes nos abrieron el camino con mucho esfuerzo y creatividad”, continúa.
Aun cuando las nuevas tecnologías hayan acercado tanta información, hay aspectos que siguen esenciales; en este sentido, Jáuregui señala que “el curso permite el encuentro entre dibujantes con intereses y sensibilidades similares, y facilita una experiencia compartida, que contrasta con las propuestas de tutoriales online, diseñados para ser consumidos en soledad. Entre los ingresantes se encuentran estudiantes de Bellas Artes, realizadores audiovisuales, historietistas, ilustradores, y chicos recién salidos de la secundaria, que ya han decidido que el dibujo es su medio de expresión”.
-Dada la trayectoria y los 20 años de trabajo, ¿qué características pensás que destacan hoy en la animación rosarina?
-La animación rosarina, al igual que la animación nacional, oscila históricamente entre lo industrial y lo artesanal. El proyecto de la Escuela se propone facilitar la producción continua de nuevos dibujitos animados rosarinos y su encuentro con la comunidad. Hay una gran diversidad de aplicaciones de la técnica de animación en Rosario. Algunos egresados siguen su formación y se profesionalizan, otros siguen produciendo pequeñas animaciones para sus redes, y también están quienes se dan por satisfechos y no lo vuelven a intentar. Rosario es una ciudad con un inmenso entretejido de producciones culturales y a les animadores nos toca estar a la altura de los músicos, teatreros, poetas y bailarines rosarinos. No podemos dejar de sumar nuestros puntos de vista a la construcción de una identidad local.
Sobre esta identidad, Jáuregui destaca una fecha que es un acontecimiento: “El próximo 13 de marzo es el cumple de 100 años de Fernando Birri, fundador de la primera escuela de cine de Latinoamérica”. En ese trabajo ejemplar, se inscribe la EPA. “Este año cursará la promoción número 20 de estudiantes, sumando más de 500 egresados y cerca de 25 horas de nuevos dibujos animados rosarinos producidos, que pueden ser visualizados en el canal de YouTube de la Escuela”, agrega el dibujante.
El curso que ofrece la EPA se desarrolla entre marzo y diciembre, distribuido en 3 clases semanales en dos turnos. El programa de clases abarca los conocimientos y prácticas necesarios para la realización integral de películas animadas: Teoría y práctica de la animación, Herramientas digitales, Diseño de personajes, Diseño de Arte, Guion, Storyboard, Técnicas Experimentales, Producción para animación, Historieta, Historia de la animación, Música para cine, Teoría del color, Fondos, Club del dibujo, Diseño sonoro, Arte rosarino, Taller abierto de Ilustración, Taller abierto de Acuarela, Voces para animación, Montaje. Se otorgan también 10 becas, que pueden solicitarse al completar la ficha de inscripción.