Desesperado por sacar de la agenda mediática el escándalo por la estafa de $LIBRA, Javier Milei utilizó muy temprano su celular para tratar de tapar los nubarrones que llegaron con nuevas revelaciones de medios internacionales. Usó las redes sociales para atacar al gobernador Axel Kicillof por el tema de la inseguridad y le dijo que debe apartarse de su cargo, es decir, renunciar. Para eso, usó el argumento de que la provincia de Buenos Aires es “un baño de sangre” y amenazó con intervenirla. Kicillof le respondió duramente y le pidió “que no sea cobarde, que deje Twitter, los delirios autoritarios y se reúna a trabajar con seriedad en un tema complejo”. “Avanza con el sueño autoritario de intervenir una provincia”, dijo el mandatario provincial y anticipó que presentarán una denuncia por delitos contra el orden constitucional y los poderes públicos. A lo largo del día, gobernadores, intendentes y legisladores de varias fuerzas políticas repudiaron el atropello de Milei. No solo eso, el ataque libertario logró una tregua en medio de la interna peronista: hubo expresiones de apoyo de Cristina Kirchner, Sergio Massa y Máximo Kirchner, entre otras figuras. 

En el mismo día en que el periódico estadounidense New York Times publicó una investigación en la que empresarios del mundo de las criptomonedas denunciaron haber recibido pedidos de coimas por parte del entorno de Milei –que iban desde los 50 mil hasta los 500 mil dólares para obtener una foto y “palanca”–, el Presidente escribió un tuit muy temprano en el que le pidió a Kicillof que deje su cargo tras el asesinato de Kim Gómez, una nena de 7 años, en La Plata. Apenas pasadas las 7 de la mañana, Milei escribió: “si le interesa el bienestar de los bonaerenses córrase del camino (esto es, renuncie) y déjenos intervenir la Provincia. En un año nosotros vamos a terminar con la violencia”. Una amenaza que generó la reacción de todo el arco político ante una nuevo intento de avanzada inconstitucional. “Hay consensos que no se tocan: la democracia, el federalismo y la constitución”, le respondió Kicillof en una conferencia de prensa de la que participaron funcionarios, legisladores y referentes propios y de distintos espacios como la intendenta de Quilmes e integrante de La Cámpora, Mayra Mendoza, o Malena Galmarini del Frente Renovador. 

“La provincia no se somete a amenazas ni extorsiones. No vamos a permitir que los intereses de los bonaerenses queden en manos de los caprichos de un presidente que no respeta la democracia”, dijo Kicillof y recordó el último antecedente de avasallamiento de la Constitución de esta semana: el nombramiento de los jueces de la Corte Suprema por decreto. “No es solidaridad conmigo, es con el pueblo de la provincia. Lo que hizo es un intento de atropellar y avasallar la soberanía popular. Pero no va a atropellar la democracia ni a nuestra provincia”, recalcó el gobernador y señaló que las expresiones no son dignas de un presidente. “Quiere intervenir una provincia que perdió”, agregó Kicillof y dejó entrever que una de las posibles causas del ataque es  tapar su participación en la estafa de las cripto: “Tal vez quiso ocultar la gravedad que tiene que hoy el Presidente de la Nación está siendo investigado por el FBI, el Departamento de Justicia y la Comisión de Valores norteamericana”.

El ataque de Milei generó tal impacto que –probablemente, de manera involuntaria–, generó un impasse en la interna peronista y logró que todos los sectores se unificaran detrás del respaldo a Kicillof. Al mediodía, la expresidenta y titular del PJ, Cristina Kirchner, reposteó un comunicado del partido en el que repudian “la gravísima e insólita amenaza de intervención” de Milei, “quien en su absoluta falta de respeto por la democracia y su estado de desesperación frente a los escándalos de público y notorio conocimiento, intenta un golpe institucional contra la Provincia y su Gobernador”. También lo respaldó el referente de La Cámpora y presidente del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, que le pidió a Milei que “si realmente le preocupa la vida de las y los bonaerenses, hoy mismo comience a trabajar en conjunto con la provincia y devuelva los más de 700 mil millones de pesos que le quitó para seguridad. Salvo que solo quiera aprovechar este doloroso momento de las familias de las víctimas para fines electoralistas”.

Hasta Sergio Massa se despachó contra el Presidente y “su propuesta desesperada por intervenir la provincia acorralado por el escándalo de su estafa”. El referente del Frente Renovador escribió en sus redes: “Esta semana que vivimos fue la más autoritaria de los últimos años: el cierre del Congreso a la prensa, la designación de jueces por decreto (con jura a escondidas!) y el recorte de derechos sin participación legislativa no son caminos para salir de la crisis. Solo la profundizan y la agravan”. Además, dijo que los legisladores de su espacio pedirán el juicio político contra la fiscal Sabrina Cladera, que liberó al joven de 17 años que está imputado por el asesinato de Kim.

En defensa de la democracia

“Va a ser falta la unidad para defender la democracia”, advirtió Kicillof. En esa misma línea se expresaron los gobernadores peronistas de La Pampa, Sergio Ziliotto; La Rioja, Ricardo Quintela; y de Formosa, Gildo Insfrán; además de los mandatarios de Tierra del Fuego, Gustavo Melella; y Santiago del Estero, Gerardo Zamora. “Es imperativo defender la soberanía de las provincias, respetar la voluntad popular expresada en las urnas y garantizar que quienes han sido elegidos democráticamente puedan ejercer su mandato sin presiones ni imposiciones”, dijeron (ver aparte). Incluso, desde el PRO tomaron distancia de la insólita propuesta del presidente de ultraderecha. "¿La solución es pedirle la renuncia?. Yo creo que no. Hay que ver cómo trabajamos en conjunto para solucionar el problema", dijo el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri. Sin embargo, el resto de los referentes amarillos hizo silencio ante la gravedad de la situación. 

También se expresaron intendentes e intendentas de un amplio abanico que engloba desde Fernando Espinoza, de La Matanza y presidente de la Federación Argentina de Municipios (FAM) hasta los integrantes del Foro de Intendentes Radicales.

La propuesta fue tan descabellada que también llegaron rechazos desde el Congreso, los movimientos sociales y los sindicatos. La CGT sacó un comunicado en el que rechazó “el intempestivo e injustificado ataque al federalismo y a la institucionalidad democrática de la provincia”. Por su parte, el sindicato de los Canillitas exigió Milei le pida disculpas a todos los argentinos por sus declaraciones que “golpean directamente en la institucionalidad, lesionan gravemente la democracia que tanto nos costó a los argentinos y vulneran la voluntad popular”.

Desde el Parlamento, los bloques de senadores y de diputados de Unión por la Patria, conducidos por José Mayans y Germán Martínez respectivamente, también criticaron fuertemente la amenaza de Milei. “Hoy, pide la renuncia de un gobernador y amenaza con la intervención de una provincia. Pero esta violencia tuvo antes a otros gobernadores como destinatarios. Si no le ponemos freno seguramente tendrán otras víctimas en el futuro”, advirtieron desde la cámara baja. Por su parte, desde el bloque de Senadores, resaltaron la participación el presidente y su hermana, Karina Milei en la cripto estafa y agregaron: “Queda claro que Milei elige un camino cada vez más autoritario, quiere gobernar por decreto, y busca la anuencia de jueces adictos y legisladores comprados”. La solidaridad con el gobernador bonaerense también llegó desde el radicalismo, Martín Lousteau y Maximiliano Abad fueron algunos de los referentes que hablaron (ver aparte).

Por último, Kicillof instruyó al Ministerio Público Fiscal para que "se investigue la posible comisión de delito contra el orden constitucional y los poderes públicos de la provincia". Además, sostuvo que Milei es el "principal responsable" del narcotráfico: "el incremento de la violencia y el crimen" en la provincia "está hoy asociado al narcotráfico, y la provincia no produce droga". "Esto es responsabilidad del gobierno nacional, y Milei es el principal responsable del narcotráfico", dijo.