Una de las tantísimas transformaciones que el feminismo nos legó en los últimos años es la de haber hecho del #8M un día de lucha, desarmando cualquier idea de feminidad y de Derechos como esencia o destino. El feminismo es una teoría política y un movimiento de acción emancipatoria. El feminismo nos convoca a poner el cuerpo y a poner palabras, y hace de ambos espacios un territorio común, tanto que los vuelve inseparables: nuestras palabras implican modos de hacer, nos llevan a hacer cosas. Las cosas que hacemos nos llevan a revisar y redefinir nuestras palabras. En
8M en tiempos de catástrofe

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