Una semana después de la sentencia en el mayor juicio de derechos humanos de la historia argentina, la causa Esma III, el Tribunal Oral Federal 5 que falló en Comodoro Py determinó que Jorge Luis Magnacco tenga su condena unificada con una anterior, con lo cual el responsable de los partos clandestinos en la Escuela de Mecánica de la Armada se ve beneficiado con la excarcelación.
Magnacco, capitán de navío, era el jefe de Obstetricia del Hospital Naval. Fue detenido en 2000 por el robo de bebés, la única causa de derechos humanos que podía progresar en la esfera judicial antes de la anulación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida. En 2005 recibió una condena de diez años de prisión por el caso de Guillermo Pérez Roisinblit (nieto de Rosa, vicepresidente de Abuelas de Plaza de Mayo). La sentencia sostuvo que “actuó con conocimiento y voluntad de prestar una ayuda indispensable en un parto que culminaría con la sustracción del recién nacido y la desaparición forzada de su madre".
Más tarde fue hallado culpable en los casos de Javier Penino Viñas y Evelin Karina Bauer Pegoraro, según contó a Página/12 Alan Iud, abogado de Abuelas, lo cual derivó en una condena unificada de quince años.
Con todo, el represor consiguió arresto domiciliario, que violó en forma sistemática, “algo que el tribunal no tuvo en cuenta al momento de tomar la decisión de hoy”, apuntó Iud. En rigor, la semana pasada fue condenado a catorce años por siete casos, y los jueces unificaron su sentencia con las anteriores, en 24. Como la libertad provisional se puede pedir una vez cumplidos 16 años y Magnacco está detenido hace 17 años, accede al beneficio.
Por Twitter, Pérez Roisinblit, que recuperó su identidad en 2000, mostró su indignación. “La pena que le impuso el tribunal fue de sólo 14 años. Algo así como 2 años por cada parto en que asistió. ¿Cómo cambiaron tanto los criterios desde el 2005 en que se le aplicó una pena de 10 años por mi y hoy solo 2 años por cada parto?”. El nieto recuperado número 68 agregó que Magnacco “hoy tiene como caución no salir del país y presentarse una vez al mes en el juzgado. Sólo eso. Tal vez esta noche se lo crucen en algún restaurante festejando en la mesa de al lado”.