El senador demócrata y excandidato presidencial, Bernie Sanders, criticó el discurso que el presidente estadounidense Donald Trump dio ante el Congreso el martes, afirmando que a su gobierno no le interesan las preocupaciones de los ciudadanos del país. Del mismo modo, los gobiernos de Groenlandia y Panamá repudiaron las declaraciones del magnate, quien, en su alocución, reafirmó su intención de apropiarse del territorio groenlandés y del Canal de Panamá.
"No le importan los estadounidenses"
Tras escuchar las palabras de Trump, Sanders dijo en una transmisión por internet que Estados Unidos se ha convertido en una sociedad oligárquica. "Este es un gobierno al que no le importan en absoluto los estadounidenses comunes y corrientes y las familias trabajadoras de nuestro país. Amigos míos, ya no estamos avanzando hacia una oligarquía, estamos viviendo en una sociedad oligárquica", afirmó. "Es un gobierno de la clase multimillonaria, por la clase multimillonaria y para la clase multimillonaria", remarcó.
El senador de Vermont también criticó al Departamento de Eficiencia Gubernamental de la administración Trump, dirigido por Elon Musk, y su ola de despidos de empleados federales. "Si Musk y sus amigos pueden echar arbitrariamente a la calle a los trabajadores federales hoy, ¿qué creen que harán Musk y sus colegas multimillonarios mañana, cuando la inteligencia artificial y la robótica exploten en este país? ¿Creen que se preocuparán por ustedes y sus familias? No, los tratarán exactamente de la misma manera que tratan a los empleados federales hoy", sostuvo.
Ni estadounidenses ni daneses
Trump también recibió críticas por su discurso en lo que se refiere a sus pretensiones expansionistas. "Groenlandia es nuestra. No queremos ser estadounidenses, tampoco daneses, somos groenlandeses. Los estadounidenses y su líder deben entenderlo. No estamos en venta y no pueden adquirirnos sin más, porque nuestro futuro lo decidimos nosotros en Groenlandia", escribió el primer ministro groenlandés, Múte B. Egede, en su cuenta en la red social Facebook.
Por su parte, el ministro danés de Exteriores, Lars Løkke Rasmussen, dijo en una rueda de prensa: "(Los habitantes de Groenlandia) quieren aflojar sus lazos con Dinamarca y estamos trabajando en ello para tener una relación más igualitaria, pero no creo que quieran hacer eso para integrarse a Estados Unidos".
Groenlandia, la isla mayor del Ártico, pertenece a la Corona de Dinamarca pero cuenta con un gobierno autónomo. Es un territorio que alberga minerales clave para la transición energética e hidrocarburos, como tierras raras, litio, grafito y cobre. Aunque sus reservas siguen siendo modestas a nivel mundial, son suficientes para interesar a los industriales que buscan diversificar sus fuentes de suministro frente al dominio de China sobre este tipo de recursos.
Durante el discurso que ofreció ante la sesión conjunta del Congreso, Trump recalcó que Washington ansía incorporar la isla a su territorio por motivos de seguridad. "Necesitamos a Groenlandia para la seguridad nacional e incluso la seguridad internacional, y estamos trabajando con todos los que están involucrados para intentar conseguirla", indicó el presidente estadounidense. "Lo vamos a conseguir de una forma u otra", reiteró.
Sobre el Canal de Panamá
Trump también aseguró que su Gobierno ya ha empezado a recobrar el control sobre el Canal de Panamá, apuntando a que recientemente la estadounidense BlackRock, una de las mayores gestoras de fondos de inversión del mundo, ha acordado comprar los puertos de Balboa y Cristóbal, en las desembocaduras del canal de manos del grupo hongkonés que los controlaba.
El magnate ha amenazado en repetidas ocasiones con tomar el control del canal, que --según él-- ha estado controlado por las autoridades chinas pese a ser una obra de ingeniería estadounidense que fue cedida a Panamá por la Administración de Jimmy Carter en los años 70. "El Canal de Panamá fue construido por estadounidenses para estadounidenses, no para otros, pero otros podrían usarlo. Pero ese acuerdo ha sido violado de forma severa. No se lo dimos a China, se lo dimos a Panamá, y lo vamos a recuperar", insistió Trump en su discurso.
En respuesta, el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, afirmó que Trump está mintiendo. "Nuevamente miente el presidente Trump. El Canal de Panamá no está en proceso de recuperación y mucho menos es la tarea que en nuestras conversaciones con el secretario (de Estado de EE.UU., Marco) Rubio ni ningún otro se haya ni siquiera conversado. Rechazo a nombre de Panamá y de todos los panameños esta nueva afrenta a la verdad y a nuestra dignidad como Nación", afirmó el mandatario en la red social X.
Ucrania y Gaza
Dentro de sus planes para obtener recursos de otros países, Ucrania también está en el radar de Trump. Durante su discurso, el magnate se mostró conciliador con su homólogo ucraniano, Volodímir Zelenski, tras haber recibido una carta de este, en la que se mostraba dispuesto a negociar la paz con Rusia y a firmar el acuerdo minero con EE. UU., que había fracasado tras su tensa reunión de la semana pasada en el Despacho Oval, y que derivó en la suspensión de la ayuda militar a Kiev. "Aprecio que haya enviado esta carta", declaró Trump.
A las pretensiones expansionistas del republicano, hay que sumarle la idea que lanzó de que su país tome el control de la Franja de Gaza para reconstruirla tras el conflicto entre Israel y Hamas, y convertirla en la "Riviera de Medio Oriente". Según su propuesta, los palestinos que la habitan deberían abandonar el territorio y migrar a Egipto y Jordania.