La noche del martes, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva realizó una llamada telefónica al director brasileño Walter Salles para felicitarlo por la obtención del Premio Oscar a Mejor Película Internacional. "Ainda Estou Aqui" se alzó con la estatuilla, marcando un hito histórico como el primer filme brasileño en lograr este reconocimiento tan prestigioso. La conversación, grabada y compartida en las redes sociales del presidente, evidenció el profundo impacto cultural que la victoria de Salles representó para Brasil y para el cine nacional.

Durante la llamada, Lula destacó que, con su obra, Salles logró "lavar el alma del pueblo brasileño y del cine brasileño", resaltando la importancia de la victoria, especialmente por tratarse de un filme que desafió las normas impuestas por la industria cinematográfica de Hollywood. Según el presidente, el trabajo del cineasta no solo fue un triunfo para la cultura brasileña, sino también una forma de recuperar la memoria histórica de un capítulo doloroso: la dictadura militar que asoló Brasil en la década de 1970.

"Esta victoria es estupendamente fantástica. Has hecho historia. Tú, Fernanda y todo el equipo", expresó Lula, refiriéndose a la relevante interpretación de Fernanda Torres y a la contribución de todos los involucrados en la producción. De esta forma, el presidente no solo celebró el logro cinematográfico, sino también el valor de la narrativa que retrata la historia de Eunice Paiva, esposa del exdiputado Rubens Paiva, secuestrado, torturado y asesinado durante la dictadura militar de 1971.

Por su parte, Walter Salles, emocionado por las palabras de Lula, expresó su honra por la distinción y reconoció la fuerza que aportaron Fernanda Torres y Fernanda Montenegro a la película. El director brasileño subrayó que el filme se construyó como un homenaje a la figura de Eunice Paiva, quien, tras la desaparición de su esposo, se convirtió en el pilar fundamental de su familia, criando a sus cinco hijos en medio de las sombras de la represión estatal.

"Ainda estou aqui", mejor película internacional

"Ainda Estou Aqui" compitió en la categoría de Mejor Película Internacional contra filmes de gran prestigio como "Emilia Pérez" de Francia, "Flow" de Letonia, "La semilla del fruto sagrado" de Alemania y "La chica de la aguja" de Dinamarca. Sin embargo, la victoria trascendió más allá de los premios: se convirtió en un símbolo de resiliencia, memoria y lucha por los derechos humanos, temas que, aún , en estos tiempos, son necesarios y fundamentales en la narrativa mundial.

La película, basada en el libro homónimo de Marcelo Rubens Paiva, hijo de Eunice y Rubens Paiva, es una adaptación que rinde homenaje a las víctimas de la dictadura, resaltando la fuerza de una madre que, ante la adversidad, lucha por mantener la dignidad y la justicia. Este reconocimiento mundial subraya la relevancia del cine como una herramienta poderosa de transformación social y de reivindicación de la memoria histórica de un país.

La victoria de "Ainda Estou Aqui" es más que un triunfo para el cine brasileño. Es un testimonio de cómo la cultura puede reescribir la historia, ofrecer justicia a los que fueron silenciados y elevar el espíritu de un pueblo que, a través de su arte, sigue buscando la verdad.

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