Un avión de Aerolíneas Argentinas debió aterrizar de emergencia en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza luego de haber sufrido una falla técnica en uno de sus motores. El accidente no registró inconvenientes para los pasajeros ni los tripulantes y la hipótesis es que un ave habría sido succionada por uno de los motores. Sin embargo, los restos de la explosión dejaron inoperable el Aeroparque Jorge Newbery, desde donde había partido el vuelo.
El Boeing 737-800 salió con destino a Neuquén a las 17.21, cubriendo el vuelo AR1648, y al despegar sufrió la explosión en uno de sus motores, por lo que, siguiendo el protocolo, el comandante de la aeronave se declaró en emergencia y realizó circuitos de "espera" para "quemar" combustible y poder aterrizar.
Según indicaron las fuentes de la aerolínea de bandera, el comandante detectó la explosión en el motor y de inmediato observó la pérdida de potencia en la unidad. La primera medida fue volar hacia una de las denominadas "rutas de escape" para evaluar la situación y al comprobar que se trataba de una posible "ingesta de ave", que dejó solo un motor en funcionamiento, se decidió aterrizar en Ezeiza.
La decisión de ir al Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini se debió a que el mayor largo de la pista brinda más seguridad para un aterrizaje sin dificultades. Desde la empresa confirmaron que el vuelo se mantuvo en una situación normal y el avión aterrizó sin ningún tipo de inconveniente a las 17.55.
El vuelo duró 30 minutos desde el despegue en Aeroparque hasta el descenso de emergencia en Ezeiza. Si bien estuvo escoltado por los servicios de emergencia, según los protocolos, la aeronave fue ubicada en un sector de plataforma, donde los pasajeros descendieron por las plataformas habituales, sin que fuera necesario el procedimiento de evacuación. Aerolíneas confirmó que los pasajeros retomarán su viaja hacia Neuquén esta noche a las 22 desde Ezeiza.
Aeroparque cerró su pista por varias horas
Alrededor de una treintena de vuelos que debían aterrizar en el Aeroparque Jorge Newbery fueron derivados a aeropuertos de alternativa debido a que la pista de aterrizaje porteña quedó temporalmente inoperable debido a los restos de motor que quedaron esparcidos por la explosión del motor del Boeing 737-800 que viajaba a Neuquén.
De la misma manera, unas 15 partidas fueron demoradas, hasta tanto se realice la limpieza de la pista y estén dadas las condiciones de seguridad para despegar. Esta tarea es esencial para que los aviones que deben despegar, lo hagan en óptimas condiciones de seguridad, ya que la mínima partícula sobre la pista puede ser absorbida por los motores y provocar una situación como la del vuelo AR1648.
La mayoría de los vuelos que debían llegar a Aeroparque fueron derivados a Ezeiza, pero al quedar completo los lugares disponibles para la ubicación de las aeronaves, algunos de ellos fueron derivados a Rosario.
