Luego de la victoria de Velez por 1 a 0 frente a San Martín de San Juan en Liniers, el defensor Valentín Gómez, responsabilizó al magnate estadounidense Foster Gillett y a la dirigencia del club por su frustrada transferencia al Udinese de Italia.

“Es verdad lo que se dijo que estuve entrenando en una plaza, eso también es culpa de la dirigencia de Vélez, si bien el primer responsable es Foster (Gillett), obviamente. Si bien no les costaba nada mandar un permiso para que pudiera entrenarme a contra turno, estuve diez días llorando en una habitación, sin poder entrenar” dijo Gómez quien reapareció ante los sanjuaninos tras haberse caído su venta porque el empresario estadounidense prometió ejecutar la cláusula de salida de contrato pero nunca abonó el monto acordado. 

"Tuve unos días complicados, la pasé mal, el recibimiento de la gente no me lo esperaba. Estoy muy agradecido por eso, porque cada pelota que tocaba que me aplaudieron demasiado" señaló el zaguero velezano quien también criticó el estado del predio donde Vélez se entrena en la localidad bonaerense de Ituzaingó.