Los bonaerenses, porteños, cordobeses y santafesinos tienen muchas diferencias entre sí, pero comparten un gran consenso en torno a las cuestiones de género y diversidad, que abre un interrogante en el oficialismo sobre las consecuencias de la tan mentada batalla cultural.
Están abrumadoramente a favor de la continuidad de la Educación Sexual Integral (ESI) y la Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), en contra del cierre del Ministerio de Mujeres y de la eliminación de la figura del femicidio, entre otras medidas.
La ESI, que se brinda en las escuelas y el gobierno amenaza con discontinuar, tiene un apoyo del 94 por ciento. Dentro de ese universo, el 83 se manifiesta "muy de acuerdo". Apenas hay 2 por ciento que no está de acuerdo y un 3 que responde "depende", sin mayores especificaciones.
Frente a la pregunta "¿Estás de acuerdo con la eliminación de la figura penal del femicidio, que reconoce y sanciona de manera específica los asesinatos por razones de género?", las respuestas se distribuyeron de manera muy similar. Entre los "nada de acuerdo" (74) y los "no de acuerdo" (14), casi llegan al 90 por ciento, frente a un 4 que se manifiesta "muy de acuerdo" y otro 4 que está "de acuerdo".
Otro tanto ocurre frente a la posibilidad de derogar la ley que garantiza el acceso al aborto libre, seguro y gratuito. Hay un 90 que se manifiesta en desacuerdo (76 "nada de acuerdo y el 14 restante "no de acuerdo"), contra un 3 "muy de acuerdo" y un 2 "de acuerdo".
Ante la consulta por los motivos, entre los defensores de la IVE predominan el derecho a la autonomía sobre el propio cuerpo (28) y la prevención de abortos clandestinos y los problemas sanitarios de allí derivados (24). En la vereda celeste, el único motivo invocado fue el religioso.
Este capítulo incluía una pregunta abierta, donde surgieron repetidamente las las frases: "La ley evita muertes por abortos clandestinos", "sin la ley, las mujeres recurrirían a métodos inseguros" y "es una cuestión de salud pública y seguridad" y otras de signo contrario como "la ley promueve una cultura de la muerte", "el aborto no debería ser un método anticonceptivo" y "se debería priorizar la adopción sobre el aborto"
Los datos surgen de la Encuesta 8M, recientemente elaborada por el Centro de Estudios de Soberanía Popular Mariano Moreno, perteneciente al Movimiento Popular La Dignidad, cuyo secretario general es Rafael Klezjer.
El equipo profesional del centro, que conduce Patricio Torras, está integrado por sociólogos, docentes y profesionales graduados de distintas universidades públicas, con fuerte inserción territorial en el conurbano y conocimiento de su realidad.
La ficha técnica indica que el estudio se realizó entre los últimos días de febrero y primeros días de marzo, sobre una muestra de 800 individuos, segmentados por género, edad y nivel educativo alcanzado, residentes en los cuatro distritos más poblados del país: Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y CABA. El método de recolección fue combinado, presencial y digital, ya que la modalidad presencial garantiza la participación de los sectores de menores recursos.
Más problemas para los Milei
Analogías es uno de los principales proveedores de encuestas del actual oficialismo, de ahí la gravedad de lo que recoge su trabajo más reciente, que da cuenta del grave impacto sobre el oficialismo de la estafa con la criptomoneda $LIBRA.
En primer lugar, el 86 por ciento manifiesta estar enterado del tema, algo absolutamente infrecuente en tiempos de fragmentación de pantallas, agendas y audiencias. Luego, el 78 por ciento entiende que la promoción de $LIBRA por parte del presidente estuvo mal y cerca del 60 por ciento, lo entiende directamente como un hecho de corrupción.
Asociado a $LIBRA, suena la posibilidad de que la secretaria general de la Presidencia Karina Milei, encabece la boleta a diputados nacionales por Buenos Aires. No parece una gran idea: tiene 27 puntos de diferencial negativo en su imagen, 27 de positiva y 60 de negativa, performance que la emparenta con figuras de larguísima trayectoria política, como los ex presidentes Cristina Fernández y Mauricio Macri.
En consecuencia, sería mejor esconderla dentro de la lista, aunque de esa manera tampoco tiene garantizada la banca, ni los tan ansiados fueros. Otro dato revela que $LIBRA pegó de lleno en el núcleo duro libertario: ahora sólo el 20 por ciento se reconoce oficialista, cuando ese porcentaje orillaba el 40 hace apenas unos meses.