La jornada de ayer fue de “lucha” pero eso no impidió, como pasa en cada Plaza de la Resistencia, que el arte estuviera presente y dijera lo suyo. Desde las 19, Peteco Carabajal, Ariel Prat, La Franela y Bersuit Vergarabat le pusieron música al escenario, pero también consignas. Lo que más sonó fue el pedido de liberación a Milagro Sala, que los músicos repitieron sin parar. “Estamos esperando el milagro de Navidad, porque no hay navidad sin Milagro”, disparó Prat, antes de lanzar los primeros acordes de Al olor del hogar, tema con el que cerró y con el que hizo bailar a todos los presentes.

Antes de él, que tocó con sus músicos temas clásicos de su repertorio, fue el turno de Carabajal, que rompió el hielo con una aplaudida Las manos de mi madre y dio comienzo a la serie de shows que terminaron cerca de las 23. “Siempre me parece importante estar, pero más allá de lo de siempre hoy lo fundamental es pedir la libertad de Milagro Sala”, dijo el cantautor, que agregó que “es claro que Macri no puede inventar nada nuevo porque ya ha probado y no pasó nada”. Su show fue el más corto (tocó cinco temas), pero le alcanzó para hacer otros clásicos además del mencionado, como Digo la mazamorra y Puente carretero.

Los músicos de La Franela subieron al escenario un poco después de Prat, y luego de que la actriz Paola Barrientos leyera una carta que la referente de la Tupac Amaru y presa política escribió especialmente para la plaza. La banda ya había tocado el jueves en el homenaje a los doce desparecidos de la iglesia Santa Cruz y ayer hizo en el escenario central de la plaza temas como Hacer un puente y Bicho de ciudad, entre otros. “Los organismos saben que siempre cuentan con nosotros. Yo vengo de una familia que no militaba así que todo lo qué pasó en la dictadura, cuando tenía apenas 6 años, lo fui aprendiendo y entendiendo recién de grande. Ahora que podemos decidir, decidimos siempre estar al pie del cañón para colaborar cuando nos necesiten”, expresó el cantante, Piti Fernández, a PáginaI12.

Luego de la lectura del documento oficial de los organismos, cerró el acto y la noche La Bersuit, que en sus 28 años de trayectoria siempre participó en actos organizados por distintos organismos de derechos humanos, sobre todo por Madres de Plaza de Mayo. La banda tocó cerca de una hora, en la que no faltaron Yo tomo y El viejo de arriba, entre otros temas más “hiteros”, pero también Vuelos, canción inspirada en el libro El vuelo, de Horacio Verbitsky, que históricamente el conjunto toca en este tipo de shows.

“Estamos totalmente comprometidos con los temas por los que se luchan hoy. Con la memoria, la verdad, la democracia y los derechos humanos”, dijo Cóndor Sbarbati, integrante del conjunto, que desde temprano estuvo al lado del escenario acompañando a los organismos convocantes.

Además de los shows musicales, la cultura también estuvo presente de otras formas: como durante todo el año, una columna de artistas pidió una “Cultura libre de negacionismo”, en referencia al pedido para que el ex ministro de Cultura porteño, Darío Lopérfido, también sea desplazado del Teatro Colón por negacionista. Además, entre las adhesiones que leyeron los organizadores hubo varias de teatros, clubes y centros culturales, muchos de los cuales están atravesando una difícil situación debido a los tarifazos. “La memoria nosotros la tenemos bien clara, ellos no”, dijo antes de irse Prat, que resumió así el mensaje de todos los agentes culturales que ayer dijeron presente en una nueva plaza del pueblo.