Las ventas minoristas de las pymes mostraron en febrero una suba interanual del 24%, que de todas maneras no alcanzó para recuperar el terreno perdido, ya que hace un año, la caída respecto del 2023 fue más alta, del 25,5%. Pero además, la comparación mensual en relación a enero registró una merma del 2,9% sin tener en cuenta los factores estacionales. Los datos fueron calculados por la CAME.

Los datos de consumo muestran una fuerte suba en la comparación interanual, producto de la paulatina recomposición salarial que se dio a lo largo del año pasado y "gracias" al subsuelo matemático de comienzos del 2024.

Sin embargo, la mejora interanual no llega a ser recuperación, puesto que todavía no permite ganarle a la caída previa. Para peor, la tendencia no mejora. Antes de la caída mensual del 2,9% frente a enero, en el primer mes del año también se había anotado una baja en relación a diciembre, del orden del 0,5%. 

Desde CAME optaron por resaltar la mejora frente al desastre de comienzos del 2024: "el impacto positivo de estrategias de ventas, como promociones y descuentos, impulsaron un movimiento distinto en muchos rubros y generaron un ambiente de mejores ventas".  Agregaron que "rubros como librerías e indumentaria escolar se beneficiaron de la demanda previa al inicio del ciclo lectivo" y destacaron que "la adaptación del comercio a nuevos hábitos de consumo, con un aumento en las ventas online y facilidades de pago, contribuyó a sostener ventas en distintos segmentos".

A nivel interanual, los sectores más dinámicos fueron perfumería, alimentos y bebidas y farmacia. En el acumulado del bimestre, lidera alimentos y bebidas, con un aumento de 32,8%. En tanto, en la comparación intermensual desestacionalizada, todos los ramos presentaron variaciones negativas, siendo calzado y marroquinería el que tuvo el mayor descenso (-5,4%) escoltado por ferretería, materiales eléctricos y de la construcción (-4,3%). También cayó alimentos y bebidas frente a enero, en un 2,1%.

Detrás del vidrio del consumo está la evolución del salario, de ahí que valga el mismo análisis: hay una recuperación frente al piso de enero/febrero de 2024, pero dicha mejora no es lo suficiente para hacer que se concrete el despegue.

De hecho, a la hora de evaluar lo que viene, desde CAME plantean que "a pesar del incremento interanual en las ventas registrado en el último mes, el comercio enfrenta desafíos en los próximos períodos, donde la evolución del poder adquisitivo de los consumidores será un factor clave, dado que muchos encuestados señalaron una marcada priorización de gastos esenciales".