DANIELITO – LA PELÍCULA 6 puntos

(Argentina, 2024)

Dirección: Gustavo Garzón.

Guion: Federico Marcello y Gustavo Garzón.

Duración: 73 minutos.

Estreno exclusivamente en Cine Gaumont.

Gustavo Garzón, actor de carácter y fuste con una extensa carrera en el teatro, el cine y la televisión, debutó como realizador cinematográfico en 2013 con el largometraje de ficción Por un tiempo, drama intimista protagonizado por Esteban Lamothe y Ana Katz. Seis años más tarde, el documental Down para arriba abordaba un tema que lo toca de cerca en la vida real, más allá de las tablas y la pantalla: las personas con síndrome de Down. Padre de dos hijos gemelos de esa condición, Garzón se acercaba en la película al grupo de teatro “Sin drama de Down”, integrado por adultos con alteración cromosómica, entregando una película sincera y emotiva, pero nunca sensiblera. En algún punto puede entenderse a Danielito – La película, su tercer film, como un desprendimiento de Down para arriba. De hecho, las primeras escenas encuentran a Garzón viajando a San Juan para presentar en una sala de cine su segundo largometraje, mientras el chofer que lo traslada desde el aeropuerto a la ciudad le habla de una persona muy famosa en el lugar, un tal Daniel López.

Garzón registra el encuentro con Danielito, cuya condición de Down “fronterizo”, como él mismo lo describe, no le impidió cursar estudios secundarios e incluso universitarios luego de sobrevivir durante décadas como vendedor ambulante de pochoclo. Cuando el actor lo conoce, López, de 55 años, no sólo es el director de su propia fundación, dedicada a apoyar de diversas maneras a personas con discapacidad, sino que también funge como empleado de planta de su municipio. Apoyándose, en ciertas instancias puntuales, en la voz en off, el director se asombra por los detalles de esa notable historia de superación, comparando la experiencia vital de Danielito con la de otras personas Down, incluidos sus propios hijos. En más de un momento se permite dudar del diagnóstico, habida cuenta de que sus rasgos físicos no son los típicos y en los años de infancia de López la medicina genética y la tecnología no permitían estudios demasiado profundos, al menos en nuestro país.

Además de relatar los múltiples encuentros con el protagonista, Garzón visita a médicos y especialistas en genética, conversa con familiares y amigos, registra sus interacciones con colegas y correligionarios e incluso filma un par de encuentros con personajes de la política como José Luis Gioja y Alberto Fernández, en aquel momento presidente de la nación (parte del rodaje tuvo lugar durante los últimos meses de la pandemia, como lo demuestran los barbijos). Muy lejos del paternalismo y la simplificación o “romantización” de la condición Down, el realizador, casi siempre presente en cámara, hace preguntas que el sentido común podría considerar inapropiadas, por eso de que “de eso no se habla”: las relaciones sentimentales, la vida sexual, la relación con la fe y la religiosidad. En el camino, Danielito - la película se transforma, sin dejar de ser una mirada documental sobre un sujeto con condiciones muy particulares dentro de un grupo especial, en el relato de una creciente y tierna amistad.