El presidente y director ejecutivo (CEO, por su sigla en inglés) de YPF, Horacio Marín, confirmó este jueves en Houston que la empresa aspiura a desprenderse este año de todos los yacimientos maduros de explotación convencional, para concentrar todas sus inversiones a partir de 2026 en Vaca Muerta. La decisión supone un cambio histórico de paradigma productivo de la petrolera estatal, ya que significa el abandono de su actividad de extracción en todo el territorio nacional, con excepción de Neuquén, para el desarrollo de los proyectos de producción no convencional de gas y petróleo. 

Los medios acreditados en el encuentro convocado por IAPG Houston, al que concurrieron decenas de ejecutivos de compañías petroleras internacionales, dieron cuenta de las definiciones del titular de YPF. Según informa el portal Econojournal, el ejecutivo argentino informó que este año YPF avanzó en la desinversión en 55 campos maduros, es decir de explotación primaria semiagotada por método convencional de extracción. 

Lo propio se logró a través del denominado Proyecto Andes, el plan de negocios a través del cual se pusieron en venta los bloques productivos que tenía concesionados YPF en Mendoza (donde ya completó su salida), Neuquén, Río Negro y Chubut, según señala el mencionado portal, citando las referencias dadas por Marín.

En Chubut, en particular, ya se habría puesto en conocimiento de autoridades y directivos de la provincia la intención de la puesta en venta en lo inmediato del bloque Manantiales Behr, perteneciente al Golfo de San Jorge. Se aseguró que ya existen varias empresas privadas interesadas.

En cambio, las áreas productivas en manos de YPF en las provincias de Santa Cruz y Tierra del Fuego no serán transferidas directamente a otras empresas, sino que se "reversionarán" (serán devueltas) a las administraciones provinciales, probablemente para ser reconcesionadas. 

"A partir de 2026, queremos concentrarnos únicamente en Vaca Muerta", expresó Marín este jueves en Houston. La prioridad de la empresa estará puesta en aumentar la rentabilidad, para lo cual no sólo se desprenderá de las áreas menos productivas (extracción convencional) sino que además buscará bajar los costos que le cobran las empresas de servicios a YPF en Vaca Muerta.  

"En Argentina, esos costos son entre 30 y 50 por ciento más altos que en Estados Unidos", señaló Marín en la sede de Houston del Instituto Argentino del Petróleo y el Gas (IAPG).

Por otra parte, según reveló la agencia internacional Reuters, Horacio Marín aseguró que YPF busca acelerar su plan de desinversión, que "incluye vender participaciones en proyectos de exploración offshore en Argentina y Uruguay". Esto abarcaría seis bloques en el Mar Argentino y un séptimo en aguas jurisdiccionales uruguayas, en la denominada Cuenca Punta del Este.

Aunque esto último no fue confirmado por fuentes locales, la orientación que Marín le está dando s su gestión significa el abandono de una de las premisas de un paradigma en la historia de YPF que aun hoy sigue expresada en su página de presentación en la web: "Los proyectos de exploración son parte esencial de la cultura de YPF".