La inflación en la ciudad de La Plata sigue en ascenso, y los comerciantes aún no logran ver señales de recuperación. Según el informe elaborado por el Laboratorio de Desarrollo Sectorial y Territorial de la Facultad de Ciencias Económicas de la UNLP, en conjunto con la Cámara de Comercio de La Plata, el Índice de Precios Básicos (IPB) registró una suba del 2,3 por ciento en febrero, superando en 0,3 puntos porcentuales al mes de enero.

El informe detalla que el rubro "Alimentos y Bebidas" lideró la suba, aportando 0,9 puntos al índice general. Dentro de este grupo, las carnes se destacaron con alzas significativas: la carne picada y la nalga para milanesa crecieron en torno al 10 por ciento, mientras que el asado subió 6 por ciento. Los productos lácteos también se encarecieron, con un incremento promedio del 3 por ciento. En contraposición, frutas y verduras contribuyeron a moderar la suba total del índice.

Federico Simone, dueño del supermercado Super Fas, contó a Buenos Aires/12 su experiencia directa frente a este contexto: "El repunte del que se habla yo no lo veo todavía, porque marzo si bien históricamente repunta obviamente, porque enero y febrero son meses donde baja notablemente la actividad”.

La Plata es una ciudad plagada de estudiantes, entonces los comercios notan mucho la baja porque la gente se va de vacaciones. “Entonces, si comparo con enero y febrero, por supuesto que marzo repuntó un montón. Ahora, si lo comparo con, no sé, otros meses que, vamos a poner, noviembre, diciembre, también es muy particular por las fiestas, pero noviembre en cantidad de gente, por lo menos, es más o menos lo mismo. Veremos cómo va avanzando", explicó.

Super Fas suele tener una afluencia aproximada de unas 500 personas diarias que se acercan a comprar al local, pero ese ritmo tiene sus momentos de pico y de estabilización. Además, Simone aseguró que todos los meses tiene constantes aumentos en los precios por más de que sean menores los porcentajes.

“Suben un 2, 2,5 por ciento, por ejemplo, en los lácteos, principalmente de la marca Serenísima, toca todos los meses un toquecito. Ya no son subas del 10 por ciento generalmente, aunque ahí hay empresas que hacen eso, por ejemplo, ARCOR, normalmente junta tres, cuatro meses sin aumento y después por ahí te aumenta un 8 o un 10, pero te mantiene los precios varios meses.”, agregó.

El comerciante sostiene que la misma situación se extiende hacia el resto de sus pares de rubro, aunque aclara que uno de los grandes gastos que tienen los supermercados tiene que ver con los servicios. La política nacional de liberar tarifas a lo largo del 2024 golpeó duramente a los comercios bonaerenses y la semana pasada a través del Boletín Oficial el ENRE se autorizó un nuevo aumento, en este caso, para los municipios que están bajo las jurisdicciones de Edesur y Edenor. En tanto, Edelap, que está dentro de la órbita de la Provincia, por el momento no tendrá subas, algo que fue interpretado por Simone como un alivio.

“El impacto también de lo que es la luz, que en mi caso es fuerte y en el de muchos que tienen supermercados de las dimensiones del mío también es un golpe fuerte, porque, por ejemplo, este último mes me vino 1.745.000 pesos de luz, estamos hablando de un supermercado de barrio con 10 heladeras y un aire acondicionado grande. Hoy, un empleado de tiempo completo por el sindicato, con 13 años de antigüedad, está cobrando 1 millón de pesos, o sea que la luz casi que te significa dos empleados, es muchísimo".

Simone cerró insistiendo con que, aunque los productos de primera necesidad se mantienen estables, las ventas no terminan de despegar: "Lo que es de primera necesidad es lo que más congelado está en aumentos, o sea por ejemplo la azúcar hace un montón que está al mismo precio al igual que la harina, y ahora hubo un aumento de aceites y de café en un 3 por ciento”. Si bien, reconoce que recientemente aumentó el café cerca de un 3 por ciento “la gente que entra al negocio es más o menos la misma de siempre".

La visión de la Cámara de Comercio platense

De igual manera, desde la Cámara de Comercio de La Plata señalaron a Buenos Aires/12 que según las estadísticas hubo una leve suba en las ventas minoristas, que no modificó la ecuación general: "El repunte en estos meses en el comercio minorista oscila alrededor del 10 por ciento, pero no así en las mayoristas de supermercados. Esto es un promedio entre enero y febrero”. “Obviamente que cuando nos abrimos en los rubros, hay algunos que fueron mejor y hay que no les fue tan bien. Después, la comparación desestacionalizada, enero del 25, enero con diciembre del 24, hubo una caída, diciembre siempre es el mes de mayores ventas, hay que tener en cuenta eso", destacaron coincidiendo con Simone.


Además, el rubro "Servicios" fue el segundo de mayor impacto en la inflación, con una suba del 3,6 por ciento respecto a enero. Dentro de este grupo, los servicios personales como peluquerías y gimnasios registraron subas del 12,2 por ciento y 21,8 por ciento, respectivamente. Indumentaria, por su parte, tuvo un aumento del 3,2 por ciento, después de varios meses con variaciones mínimas. Por detrás quedaron combustibles (0,3 p.p.), servicios del hogar, restaurantes e higiene personal (0,1 p.p. cada uno). Ningún rubro registró bajas de precios.

El estudio también destaca que la venta de autos 0km mostró una fuerte suba del 140,2 por ciento interanual en febrero, mientras que las transferencias de autos usados crecieron 23,7 por ciento en el mismo período. En los dos primeros meses del año se patentaron 2.652 unidades, superando en 15 por ciento la media de los últimos seis años.

Así, mientras las estadísticas reflejan variaciones moderadas en los precios, la realidad de los comerciantes de barrio muestra que el repunte esperado no se ve reflejado, y las facturas de servicios y el contexto económico siguen complicando el día a día del comercio platense.