El ciclo lectivo comenzó, pero las clases no. Este lunes arrancó un nuevo paro de docentes universitarios en todo el país, con una medida de fuerza de 48 horas que vuelve a poner sobre la mesa lo que el Gobierno prefiere barrer bajo la alfombra: la crisis estructural del sistema universitario argentino. Sin aumentos salariales reales, con becas congeladas y obras paralizadas, la comunidad académica denuncia lo que ya se convirtió en una constante del modelo Milei: desfinanciar para disciplinar.