El Ministerio de Finanzas alemán anunció un paquete de 3.000 millones de euros en ayuda militar a Ucrania, enmarcado en la nueva reforma constitucional aprobada el martes en la Cámara Baja del Parlamento (Bundestag), con 517 votos a favor y 207 en contra. La reforma incluye la eliminación del límite de endeudamiento para el gasto en defensa y un ambicioso plan de inversión militar.
En una votación en bloque, la Unión Cristianodemócrata (CDU) y su aliado bávaro, la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), junto con el Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) y Los Verdes, lograron la mayoría de dos tercios requerida para modificar la Constitución, un cambio significativo en un país que durante décadas mantuvo un estricto control presupuestario.
Para su entrada en vigor, la reforma aún debe ser ratificada por la Cámara Alta (Bundesrat), donde están representados los estados federados. La sesión está prevista para el próximo viernes y se considera un trámite administrativo.
Tras la aprobación inicial de la reforma, el Ministerio de Finanzas alemán liberó un paquete de ayuda militar de 3.000 millones de euros en apoyo para Ucrania. El gasto, que supera lo presupuestado inicialmente, fue justificado por la difícil situación militar en el país exsoviético. Se espera que el Comité de Presupuesto del Bundestag apruebe formalmente el desembolso en su reunión del viernes.
Desde el inicio de la invasión rusa en febrero de 2022, Alemania ha destinado 180.770 millones de euros a su defensa, incluyendo un fondo especial de 100.000 millones de euros para el rearme de Ucrania.
Una "nueva dirección"
Con esta reforma, el gobierno podrá excluir del límite de endeudamiento constitucional cualquier gasto en defensa que supere el 1% de su producto interno bruto (PIB), equivalente a unos 43.000 millones de euros. Además, se creará un fondo especial de 500.000 millones de euros para infraestructura y protección climática.
Según el líder de la CDU y virtual canciller, Friedrich Merz, la medida está justificada en medio de un contexto geopolítico hostil, con el acercamiento de Estados Unidos con el gobierno de Vladimir Putin. "La principal circunstancia que justifica los cambios es la guerra de Putin contra Europa", dijo durante la sesión extraordinaria en la que debatió, en la que alegó que "no se trata sólo de una guerra contra la integridad territorial de Ucrania". Merz definió el plan como un "primer gran paso hacia una nueva comunidad europea de defensa", que incluya "países que no son miembros de la Unión Europea".
Por su parte, el nuevo líder del SPD, Lars Klingbeil, coincidió en que la reforma se trata de "dar una nueva dirección a la historia" del país y Europa. El sucesor de Olaf Scholz valoró que la reforma de la Ley Fundamental (Constitución) es una cuestión de interés nacional, en un momento en que Estados Unidos se tornó "impredecible".
El voto del Bundestag fue recibido con entusiasmo por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien calificó la decisión como una "excelente noticia", pues envía el mensaje de que "Alemania está dispuesta a invertir de forma masiva en defensa e infraestructura".
A su vez, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, también celebró la reforma, destacando en la red X que envía "un poderoso mensaje" que ayudará a "marcar la diferencia en la habilidad de la OTAN de disuadir y defender".