En otra demostración del desdén oficial hacia la protesta social y la libertad de expresión, el vocero presidencial Manuel Adorni no solo defendió el operativo represivo contra jubilados en el Congreso, sino que lo calificó como un “ejemplo de excelencia”. Desde el atril de Casa Rosada, el funcionario justificó el accionar de las fuerzas federales, avaló la gestión de Patricia Bullrich y aprovechó para anunciar un nuevo protocolo para los periodistas acreditados, que incluye filtros por audiencia y un insólito “código de vestimenta”.
Lejos de tomar distancia del operativo que terminó con jubilados golpeados y periodistas heridos, Adorni elogió sin matices el rol de la ministra de Seguridad. “Lo que vimos ayer fue un ejemplo de excelencia. Bullrich debería ser condecorada”, sostuvo, en una frase que funcionó como respaldo total a la titular de Seguridad, cuestionada incluso por sectores moderados del oficialismo. Ni una palabra sobre los adultos mayores reprimidos en pleno centro porteño, ni una mención a los organismos de derechos humanos que exigieron explicaciones.
Fotógrafo herido y una ruptura sin empatía
El caso de Pablo Grillo, el reportero gráfico que resultó herido de gravedad por un cartucho de gas lacrimógeno durante la protesta, también fue abordado por el vocero. Adorni reconoció que el vínculo con la familia del fotógrafo “se rompió” tras las declaraciones de su padre, quien señaló a Bullrich como “cómplice” del accionar policial. “Hablamos todos los días del tema, pero el diálogo con la familia está quebrado”, dijo, en una respuesta que volvió a colocar al Gobierno del lado de la represión, incluso frente a una víctima directa de la violencia institucional.
Código de vestimenta, selección de medios y más controles
Como parte del rediseño en la relación con los medios, Adorni anunció que a partir de abril se pondrán en marcha nuevas reglas en la sala de conferencias de la Casa Rosada. Entre ellas:
- Imposición de un “código de vestimenta” para los acreditados.
- Selección de periodistas de a cuerdo al “alcance y audiencia” de cada medio.
- Participación prioritaria de medios del interior.
- Creación de un “código de convivencia” para evitar “ruidos innecesarios”.
En nombre de la “disciplina”, el Gobierno introduce un sistema de acceso selectivo que limita el ejercicio del periodismo crítico en las conferencias oficiales. Con este nuevo filtro, será la Casa Rosada quien decidirá quién pregunta y cómo se comporta.
FMI, secretismo y ajuste sin fin
Adorni también dedicó parte de su intervención a defender la falta de transparencia en las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional. “No es un cheque en blanco”, repitió, pese a las críticas de la oposición por la confidencialidad de los términos del acuerdo. La frase buscó disipar las dudas, pero volvió a exponer la distancia entre el discurso oficial y el malestar creciente en una sociedad golpeada por el ajuste.
Menem, “uno de los mejores”
En un guiño a los sectores más leales del oficialismo, el vocero también salió al cruce de las críticas contra Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados, tras una escandalosa sesión con la oposición. Según Adorni, Menem será recordado como “uno de los mejores presidentes de la historia” de la Cámara Baja. Ni las interrupciones arbitrarias ni el autoritarismo en el recinto parecen afectar el entusiasmo con que el Gobierno celebra su propio espejo.