“No hay manera de que Superman destruya a Goku”. Toda una declaración de principios que sucede en Side Quest (estreno el próximo miércoles), serie de antología derivada de Mythic Quest. Si aquella comedia al estilo The Office seguía los pormenores de los geeks que habían creado un exitosísimo juego de rol on line, en estos cuatro episodios unitarios expande el chiste hacia zonas más o menos conocidas. O al menos eso es lo que propone esta saga creada por Ashly Burch, John Howell Harris y Katie McElhenney. Cada uno de los capítulos tiene como protagonista a algún personaje aleatorio de esta saga con señas bastante reconocibles sobre el universo gamer. Lo mismo que un denodado amor por esas criaturas y cultura.
El título, de hecho, hace referencia a un vocablo propio del glosario de videojuegos. Las “side quest” son las misiones alternativas al objetivo principal para conseguir una determinada recompensa. Ergo, el hipernarcisista de Ian Grimm (Rob McElhenney), director creativo del videojuego, le da pie a uno de sus empleados, a una fan de su obra, a una música contratada para una presentación gamer y a cuatro veinteañeros en medio de una contienda on line. Es que en esta comarca siempre habrá una vida y risa extra.