Lo mejor que tuvo el empate cero a cero entre Bolivia y Uruguay de este martes fue que le abrió paso a la clasificación argentina para el próximo Mundial tripartito de 2026. En los casi insoportables 4150 metros de altura de El Alto, un suburbio de La Paz, los bolivianos hicieron casi todo para ganar. Incluso estrellaron una pelota en el palo y volvieron a convertir en figura a Sergio Rochet, el arquero que ya se había destacado contra la Selección. Los uruguayos sólo aguantaron. Pero al final se llevaron ese punto que vinieron a buscar y que todavía los mantiene dentro de la zona de clasificación directa a la próxima Copa del Mundo.
Marcelo Bielsa cambió medio equipo respecto del que había perdido el viernes ante la Argentina y dejó en el banco a Nahitan Nández, Federico Valverde, Darwin Núñez y Facundo Pellistri. Todos ellos entraron en el segundo tiempo para colaborar en la tarea de la resistencia. Uruguay trató de jugar al paso, alargando cada interrupción para ganar tiempo y poder respirar. Fue llamativo ver a sus jugadores boquear desde los primeros minutos en busca de aire. Y hasta aspirar oxígeno de los aerosoles que estaban afuera de la cancha. El partido resultó un suplicio para Uruguay y sólo llegó con dos tiros de Núñez y Ugarte. Antes y después lo suyo fue heroico, imposible de considerar desde lo futbolístico. Y muy alejado de lo que pretende Bielsa. Las atajadas de Rochet lo sostuvieron hasta el final.
Bolivia buscó desde afuera con remates de sus mejores jugadores, el enganche Ramiro Vaca y el zurdo Miguel Terceros. En la primera etapa, Rochet manoteó al corner un derechazo de Vaca desde casi cuarenta metros y en la segunda, otro derechazo del volante dio en el palo izquierdo. Cerca del final, Paniagua desbordó por la derecha y su centro cruzó el área chica sin que Algarañaz pudiera traducirlo en gol. Faltaron luces en el ataque boliviano, pero tuvo las situaciones para ganar. La seguridad de Rochet y sus propias carencias lo dejaron en cero. Con un empate que se lamentó en la altura, pero que se celebró en toda la Argentina.