El Centro de Experimentación del Teatro Colón inaugurará su temporada 2025 con Experimentum Mundi, una dramaturgia del trabajo para 16 oficios, un narrador, cuatro voces femeninas y un percusionista, de Giorgio Battistelli. El jueves 27 a las 20 en la sala de Tucumán 1171 –se entra por el Paseo de los Carruajes–, la obra del compositor italiano se pondrá en escena con la participación de trabajadores de los distintos oficios que articulan la vida técnica y administrativa del Teatro Colón, desde los talleres del subsuelo hasta las oficinas de los pisos altos. Pablo Siejo será el narrador, Pablo Lo Bianco estará en la percusión y la dirección musical estará a cargo de Lucas Urdampilleta. Experimentum Mundi se repondrá el viernes y el sábado a las 20 y el domingo a las 17 y el 1, 3 y 4 de abril, a las 20.

Estrenada en el Teatro Olímpico de Roma en 1981, Experimentum Mundi aborda desde el teatro musical, entre otras cosas, una de las cuestiones centrales de las vanguardias musicales de la segunda mitad del siglo XX: el ritmo, las medidas del tiempo y sus sinuosidades. Hace ya varias décadas, Battistelli intuyó una respuesta posible a esa pregunta –que por artística nunca termina de contestarse– cuando escuchó trabajar al zapatero remendón de su pueblo. El compositor notó que en el proceso, por ejemplo, de cambiar media suela y taco –cortar el cuero, aplicar el pegamento y martillar primero sobre los clavos y luego sobre el cuero para suavizar los bordes– se producen ritmos extraordinarios. Extendió esa idea a la labor del albañil, el herrero, el escultor, el carpintero y otros oficios y sobre esa fuerza trabajo elaboró un libreto a partir del Diccionario Razonado de las Ciencias, las Artes y los Oficios, que Denis Diderot y Jean Baptiste d’Alembert elaboraron en el siglo XVIII en torno a las ideas de la ilustración.

En escena, zapateros, herreros, escultores, picapedreros, administrativos, archivistas, maquinistas, utileros y cocineros ponen en juego sus saberes, trabajan. El trajín de los oficios activa la máquina rítmica, la acción musical que se ordena y se articula a partir del recitado de los textos enciclopédicos, para que al final de la obra, además del goce estético, queden los productos del saber y del trabajo terminados. Representativa de aquellas vanguardias del siglo XX que todavía hoy alimentan el presente, Experimentum Mundi es música de acción, convivencia sonora en la que los oficios escuchan su trabajo y transforman la rutina y el hábito en un gesto artístico.

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Martín Bauer es el director artístico del CETC, nombrado por la nueva gestión del Teatro encabezada por el uruguayo Gerardo Grieco. Desde hace varias temporadas responsable del ciclo Colón Contemporáneo, Bauer es hombre experimentado en la elaboración y gestión de las modernidades artísticas y sus avatares administrativos. En su versión “museo de las vanguardias”, la tempoara del CETC comienza con una puesta importante y atractiva de un compositor de referencia. Para continuar, ante los escasos recursos económicos, se agudizó el ingenio, replanteó ideas, recurrió a los archivos, al talento local y a la generosidad de instituciones culturales extranjeras en Buenos Aires.

Con el apoyo del Instituto Francés de Argentina en mayo estará la destacada coreógrafa Leïla Ka, que al frente de su compañía presentará dos espectáculos Maldonne (11, 12 y 13) y un programa compuesto por los solos Pode Ser y Se faire la belle y el dúo C´est toi qu´on adore (15, 17 y 18). Con el apoyo del Instituto Italiano de Cultura de Buenos Aires el 29 de junio se presentará el Ensamble Tempo Reale, que bajo la dirección de Fancesco Giomi presentará un concierto homenaje a Luciano Berio –fundador del Ensamble–, de quien este año se cumple el centenario de su nacimiento. Se podrán escuchar obras de Bruno Maderna, Silvano Bussotti y el mismo Berio.

Para julio está previsto el ciclo “Solos” con la participación de artistas destacados de distintas disciplinas en performances en solitario: el 11 y el 12 María Inés Aldaburu leerá El Martín Fierro ordenado alfabéticamente, de Pablo Katchadjian; el 18 y el 19 Claudio Cladini presentará "Cine experimental" y el 25 y el 26 Lucas Urdampilleta interpretará en grandioso ciclo de variaciones para piano sobre el tema El pueblo unido jamás será vencido, del estadounidense de Frederik Rzewski. En septiembre, en coproducción con el Grame CNCN –el Centro de Investigación Musical de Lyon–, se estrenará la obra que Valentín Pelisch y Emma Terno cumplieron en su período de residencia. OOO –así se llama la obra– pone en juego herramientas audiovisuales para invocar el rastro fantasmal de Dalida, la famosa cantante y actriz egipcia, naturalizada francesa, un icono pop de los ‘60 y los '70. 

En octubre, la directora y coreógrafa Melisa Zulberti pondrá en escena una instalación performática de danza en cargada especialmente por el CETC, y en noviembre se conmemorarán los 100 años de la muerte de Erik Satie. Entre las 20 del sábado 22 –Día de la música– y las 19 del domingo 23 se ejecutará Vejaciones, la ocurrencia del compositor francés que prescribe que una breve página para piano se repita 840 veces. “Será bueno prepararse con antelación, y en el más profundo silencio, para la más intensa inmovilidad”, advirtió en su momento Satie para lo que nunca pudo ver realizado. Participarán 90 pianistas de diversos estilos, edades y formación.

El 30 de noviembre, en el cierre de la temporada, el homenaje a Satie se prolongará con la versión para voz y piano del oratorio Sócrates. Compuesto en 1918, Sócrates fue concebido como un “drama sinfónico” a partir de tres de los Diálogos de Platón y en esta oportunidad se anuncia como "conicerto escenificado" con una puesta en escena de Emanuel Fernández y la participación de la pianista Fernanda Morelo. Un cierre atractivo para la legión de admiradores de Satie y para una temporada que, este no es un dato de vanguardia, asume el desafío de experimentar con la marca de la austeridad.