Cierta vez le escuché decir a Fito Páez en un reportaje que le realizara Verónica Castro allá por el año 1992, que no le molestaban las comparaciones, y que, de hecho, las comparaciones las recibía como elogio. Fito argumentaba que, si alguien lo comparaba con Prince, para él eso era motivo de orgullo.
Precisé hacer este prolegómeno, porque necesariamente, a veces para hablar de música, se hace indispensable la comparación. Ocasionalmente la música se escapa a las palabras, por no decir siempre, entonces la comparación se vuelve una herramienta que facilita la comunicación.
Este 28 de marzo de 2025, se ha publicado un nuevo álbum de Fito Páez, y nunca mejor usada la palabra álbum, puesto que la obra es conceptual y tiene pretensiones de ópera rock.
Se trata de su postergado disco Novela, aquel de 1988 que por diferentes motivos quedó en el camino, y ahora finalmente encuentra su lugar en el mundo.
En el transcurso de estos últimos 36 años, Fito fue echando mano de algunas de esas canciones, como el caso de la canción Circo Beat que le dio nombre al famoso LP de 1994.
Novela 2025 viene a contrapelo de los tiempos actuales. Estas épocas no parecen propicias para un “larga duración”, cuya misión es contar una historia, sin embargo ¿a quien le importa?, Fito Páez tiene un cheque en blanco y puede hacer lo que quiera.
Y lo que quiso parece ser justamente eso, decirle al oyente: ¿Querés escuchar un disco? Bueno, sentate y disponé de una hora ocho minutos, y si no, chau y hasta mañana, por citar sus palabras.
Y ahí arranca Novela, con "Universidad Prix" al ritmo de la música disco traída de los 70, y hasta se escuchan los coritos de "Stayin Alive" de los Bee Gees. El beat de Circo Beat flota en la canción, y flotará a lo largo del disco, y también hay reminiscencias a la banda de Jeff Lynne, Electric Light Orchestra, específicamente al LP Discovery de 1979.
La lista de temas, va mixturando canciones con relatos a lo largo de 25 pistas, y es así que, como segundo tema en lista, nos encontramos con un relato llamado "El Amor".
Particularmente, nos limitaremos a hablar aquí de las canciones. De los relatos, no tiene demasiado sentido hablar puesto que son literales. Alcanza con decir que funcionan de modo explicativo y van enhebrando la historia.
Entramos a "Brujas Salem de Prix" y el sonido nos lleva nuevamente al disco de 1994 y la melodía tiene ciertos giros que recuerdan "La ciudad de los pibes sin calma" del disco Ey!, justamente el trabajo paralelo a Novela allá por el 88.
Destaco el trabajo del bajo eléctrico. Tiene un sonido muy profundo, y aprovecho para decir aquí que todo el álbum tiene un sonido excelente, no podía ser menos siendo un disco grabado en Abbey Road, estudio que no se puede mencionar sin usar la palabra mítico.
Arribamos así al cuarto tema llamado "Maldivina y Turbialuz" y acá aparecen las influencias de quien se autoproclamó maestro de Fito al decir: "Fito es uno de mis alumnos más aventajados". Estoy hablando de Charly García, y es que esta canción es una mezcla de "Yo no quiero volverme tan loco" y "Mr. Jones o Pequeña Semblanza de una Familia Tipo Americana", o no.
El próximo tema es el "Mariposa Tecknicolor" de Novela. "Cuando llega el circo al pueblo" ya lo habíamos conocido porque es el corte de difusión y se había lanzado como single. Tengo que decir que aquí escucho la influencia de Litto Nebbia, por lo menos en el sonido del teclado que me deja en las puertas de aquellos queridos discos de Los Gatos.
Luego viene un relato que desemboca en "Cruces de gin y sal" una canción muy Páez que modula de menor a mayor en los primeros compases y que tranquilamente podría haber escrito McCartney. Allí está la trompeta de Penny Lane pero esta vez no tan veloz como fue antes en la canción de 1994 "Normal 1" donde era más obvia la referencia.
Llegamos ahora a "Jimmy Jimmy", una especie de "Helter skelter" pop, y una rítmica que liquida en una cita textual del enlace entre estrofas de Sgt Pepper's lonely hearts club band.
"Miss Understood" es un vals con ukelele con arreglos propios de las orquestas de swing de los años 40, que de a poco se va transformando en una música de película de Hollywood, con orquesta completa y sonidos de elefantes.
"Balas y Flores" remite a la lírica de Spinetta, llanto bagualero mediante, que nos lleva al próximo tema, un pop que ya conocíamos porque fue el otro single llamado "Superextraño" y de ahí pasamos a "Herencia" que recuerda el comienzo de "Todo a pulmón" de Alejandro Lerner, y luego se transforma en lo que podría ser un numero de comedia músical.
"Modo Carrie" recupera el beat del principio, y hay una guitarra contante al estilo funky y, en la segunda parte entran los vientos y se acentúa el ritmo funk. Voz distorsionada y doblada en octavas.
"Love is Falling Over My Heart" cantada en inglés y con un sonido AM lennoniano que de a poco va ganando lujo, y que recuerda a "She's mine" de Circo Beat.
"Argentina es una trampa" coescrita con Coki Debernardis, tiene un riff y una melodía descendente con ritmo rápido y contundente. La letra es tal vez la más visceral del álbum.
Llegamos a "El vuelo", canción arreglada al mejor estilo Pet Sounds, y con un final a toda orquesta citando "Era de uranio" de Spinetta Jade.
"Aceptémoslo" es el próximo tema, con un piano grave marcando el bajo, bajadas cromáticas, y allá por el medio entran la base de "Tomorrow never knows" de The Beatles.
"El último apagón" podría ser una canción de Ciudad de pobres corazones, disco de Fito de 1987. Melodía dylaneana y guitarra solista a lo Pink Floyd.
"El triunfo del amor" con una melodía que remite a "Sweet child o mine" de Guns n Roses, pero lenta. No se si existen las melodías “noventosas”, pero si existen, esta lo es. La canción acontece en una especie de rap a lo Trafico por Katmandú de El amor después del amor, su obra maestra de 1992.
"Los corazones necesitan amar" con base rítmica inspirada en "Inconsciente colectivo" de García, tiene un texto que por momentos parece entrar a la fuerza en la melodía y así llegamos a "Julius perdiéndolo todo", una especie de tango borracho con piano desafinado. Un recitativo profundo de voz quebrada con perros que ladran en el fondo.
Ahora "Sale el sol", un número esperanzador y optimista que funciona como cierre del disco desde lo musical, puesto que la última pista es un relato donde el propio Fito nos dice que el amor ganó la partida, y que la vida puede ser maravillosa.
-¡Qué bello es vivir! -nos dice.
Y así se va Novela: ¿Opera rock? ¿Comedia musical? ¿Opereta pop?
No importa.
Es un álbum, es una historia y nos gustan las historias.