La firma Ternium suspendió a 120 trabajadores en la planta de San Nicolás, provincia de Buenos Aires, que con capacidad para producir unas 150 mil toneladas mensuales funciona al 50 por ciento. La medida forma parte de un plan de recortes de personal que incluyó el ofrecimiento de retiros voluntarios y despidos que no fueron cubiertos luego de la decisión empresaria.

La crisis de la industria siderúrgica a nivel nacional se profundizó con la decisión del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, sobre establecer aranceles del 25 por ciento a todos los artículos de acero y derivados del acero. El sector ya se encontraba resentido por el freno a la obra pública, la recesión de la construcción, la caída de la demanda de las automotrices y la reducción de pedidos desde las alimenticias.

La compañía del Grupo Techint había decidido el 17 de marzo implementar un esquema de suspensiones rotativas con descuento del 25 por ciento en los salarios. En un comienzo incluyó a 60 operarios y está semana duplicó el número de empleados afectados. De acuerdo con testimonios de la Unión de Obreros Metalúrgicos, el sector está "muy complicado" y no pueden anticipar cómo continuará la situación durante los próximos días. 

Al mismo tiempo, distintas empresas contratistas relacionadas a la actividad en la zona, se encuentran dando de baja decenas de contratos a trabajadores eventuales. "Nivelemos la cancha. Queremos integrarnos al mundo”, pidieron desde la Unión Industrial Argentina al Gobierno nacional ante los últimos anuncios del mandatario norteamericano que repercuten sobre la producción de manufacturas.