Amancio Martínez, cacique wichí de Misión La Paz, pueblito del Chaco salteño que limita, río de por medio, con la localidad paraguaya de Pozo Hondo, difundió ayer un video en el cual denunció el desmoronamiento del anillo que los protege del ingreso de las aguas del río Pilcomayo.
Si bien la crecida pasó y las aguas ya están bajando, hacen un movimiento “un codo en forma de s”, que provoca que la corriente pegue sobre el anillo y haya comenzado a desmoronarlo.
El cacique manifestó su preocupación de que las aguas terminen por romper la defensa e inunden las comunidades ribereñas.
“El río está muy bajo, va a ir comiendo (la costa y las defensas), pero no va a desbordar”, analizó por su parte el integrante del Sistema de Alerta Temprana de la cuenca del Pilcomayo, Luis María de la Cruz. Sin embargo, consideró que el problema puede ser peor, si la zona se queda sin defensa, cuando el río vuelva a crecer en octubre o noviembre.
El río arrastra los sedimentos mientras bajan los niveles del agua, explicó a Salta/12 el secretario de Recursos Hídricos de la provincia, Mauricio Leal. “Se está haciendo un diagnóstico de la situación”, afirmó. "Una vez que pasen las crecidas debemos ver cómo quedaron las defensas”, señaló.
Leal sostuvo que año a año se refuerzan las defensas de manera sistemática. Este año en particular el nivel que alcanzó el cauce del Pilcomayo fue uno de los más altos en mucho tiempo.
“No solo tenés una crecida, además llovió muchísimo. Hubo 15 días seguidos de precipitaciones”, afirmó el secretario. Y esta situación, dijo, provoca la erosión de los terraplenes y su posterior agrietamiento.
Mauricio Leal indicó que de todas maneras el río “aún está alto”, al punto de que en el puente internacional de Misión La Paz “queda una gran cantidad de enramada” que, a su vez, obstaculiza el paso del agua corriente abajo.
Al ser consultado sobre el dragado del cauce del río como otra medida para evitar los desbordes, el funcionario sostuvo que “no es tarea fácil y precisa de la autorización de los tres países” que atraviesa el curso del Pilcomayo, Bolivia y Paraguay, además de Argentina,.
Señaló que una de las características de la cuenca del Pilcomayo es que nace a unos 1300 metros sobre el nivel del mar, en Bolivia, y al llegar a Misión La Paz, esa altura llega a los 250 metros. En el trayecto viene arrastrando gran cantidad de sedimento.