El arzobispo de Rosario, Eduardo Martin, aseguró que "es un gran dolor para toda la Iglesia" la muerte del Papa, a quien consideró "el más importante de los argentinos en toda la historia". 

La máxima autoridad local de la Iglesia dio una conferencia de prensa ayer al mediodía, tras volver de Buenos Aires -tenía previsto un viaje a Roma- en la sede del Arzobispado de calle Córdoba al 1600. "El Papa estaba delicado, pero venía recuperándose, y uno no esperaba que fuera tan de golpe. Es un gran dolor para toda la Iglesia. Nos deja consternados. También para la Argentina, porque fue el Papa argentino, el más importante de los argentinos en toda la historia, al haber ocupado el papado, la cabeza visible de la Iglesia Católica", consideró.

Martín recordó que Jorge Bergoglio promovió "una Iglesia en salida, misionera, una Iglesia misericordiosa, un hospital de campaña, un lugar donde sanar heridas del alma. Un Papa que hizo de la justicia y la paz pilares de su pontificado, siempre defendiendo a los más pobres, a los descartados, a los marginados. Una Iglesia donde todos los bautizados caminemos juntos".

En ese sentido, recordó su primer gesto como Papa: "Fue a la isla de Lampedusa, donde llegaban todos los inmigrantes. La preocupación por los migrantes fue una constante hasta el final", puntualizó.

También recordó que Francisco siempre se acordó de Rosario: "En el año Mariano, cuando se cumplían los 250 años de la imagen de la Virgen del Rosario, nos envió un video desde Roma. Y el año pasado, en plena crisis de violencia en la ciudad, nos mandó un mensaje muy importante", rememoró.

A su vez, manifestó su tristeza porque no haya podido venir a la Argentina. "No dependía de nosotros. Pero la muerte no es el final, sino la Pascua. Él ahora ha hecho su Pascua. Fue recibido por Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo, y por la Virgen, de quien era muy devoto. Su muerte nos entristece, pero nos consuela la esperanza de la feliz resurrección", manifestó.