La Cámara de Diputados realizó este martes la sesión especial para rendir homenaje al Papa Francisco tras su fallecimiento. El diputado de Unión por la Patria y ex embajador ante el Vaticano durante el papado de Jorge Bergoglio, Eduardo Valdés, fue el encargado de izar la bandera argentina al comienzo de la sesión.

Solicitado por el propio Valdés, el debate se inició con un minuto de silencio y con la presencia de 132 legisladores. El acuerdo entre todos los presidentes de bloque para homenajear al Papa se alcanzó al mismo tiempo que se decidió postergar para el martes próximo la sesión convocada para interpelar al jefe de Gabinete, Guillermo Francos; al ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona; y a otros funcionarios del Poder Ejecutivo por el Criptogate Libra. En la Cámara alta ocurrirá lo mismo el jueves, cuando el homenaje a Francisco postergue el debate sobre el proyecto de Ficha Limpia.

"Gracias a los presidentes de bloque por haber tomado la decisión (de realizar esta sesión). Una de las causas que sentía Francisco para venir a la Argentina era ser prenda de unidad. Hoy lo has logrado, Francisco", sostuvo Valdés durante su intervención.

Recordó que "durante los días de la enfermedad de Francisco, me paraban en la calle personas de pañuelo verde, celeste, agnósticos y de otros credos religiosos que me preguntaban por él". "Fue el primer constructor de puentes", valoró.

En ese sentido, Valdés también señaló que "el día en que él nos dejó es de coincidencias, de encuentro y de respeto, incluso para aquellos que no lo quieren", y agregó: "La virtud de Francisco fue discrepar en profundidad en los valores fundamentales que él tenía y coincidir cuando había que coincidir".

Entre otros hitos de su papado, Valdés recordó las negociaciones en la guerra con Siria, el proceso de paz en Colombia y la apertura entre Estados Unidos y Cuba durante la gestión de Barack Obama.

El primer orador fue el radical Julio Cobos, quien recordó haber visto a Francisco en tres oportunidades, cuando todavía era cardenal de Buenos Aires: la primera, cuando asumió como vicepresidente, y otra durante el conflicto por la Resolución 125. Dijo que lo recibió "tratando de encontrar una salida que brindara paz y tranquilidad al pueblo argentino". "Era un hombre de mucha sensibilidad social, preocupado por la educación para incluir a los más humildes", valoró Cobos.

También habló el diputado de La Libertad Avanza, Santiago Santurio, quien relacionó la fe con el contexto que atraviesan millones de argentinos: "Los que tenemos fe creemos que el dolor es un camino que tiene un destino de gloria y de salvación", y consideró que "el dolor que genera (la muerte de Francisco) tiene el consuelo de la esperanza de la salvación. El pueblo argentino tiene que saber que eso era lo que el Papa pensaba, creía y evangelizaba".

Por su parte, la diputada de Democracia para Siempre, Danya Tavela, rindió homenaje al Papa y cuestionó al oficialismo por no respetar su palabra ni sus gestos de austeridad: "No es necesario enviar ningún tipo de comisión", dijo respecto del debate sobre si un grupo de legisladores debe viajar a Roma. "Para ser ejemplares y menos hipócritas, nos ahorremos andar garroneando un viajecito a Roma", cargó.

El presidente del mismo bloque, Pablo Juliano, dijo que con la partida de Bergoglio se va "un profeta criollo" que enseñó sobre el perdón. "Ni comunista, ni díscolo, ni defensor de dictaduras sangrientas, ni populista, ni aliado del mal", dijo, y recordó los dichos de Milei: "Francisco fue el mismo que, con un abrazo, perdonó al que lo acusó sin ningún motivo de ser el representante del maligno en la Tierra".

Desde la Coalición Cívica, la diputada Marcela Campagnoli elogió la labor de Francisco y opinó que "su mayor modificación fue el rol que le dio a la mujer dentro de la jerarquía eclesiástica". "Francisco entendió que la Iglesia no podía seguir ignorando el inmenso talento, la sabiduría y la dedicación de las mujeres. Reconoció que la Iglesia, para ser verdaderamente universal, debía abrir las puertas a la participación femenina en todos los niveles", expresó Campagnoli.

En tanto, el presidente del bloque de la UCR, Rodrigo De Loredo, destacó a Bergoglio como alguien que "supo liderar y conducir" a la Iglesia Católica, aunque confesó que le cuesta "descifrar cuál es el mensaje que particularmente nos deja el Papa Francisco a los argentinos".

De Loredo remarcó el origen jesuita, de opción por los pobres, elegido por Francisco, y cuestionó que algunos lo hayan interpretado políticamente sin entender que "para la organización institucional de la Iglesia católica, el pensamiento liberal y secular, que separa Iglesia de Estado, es siempre una amenaza política".

Finalmente, sostuvo que "cualquiera sea la mirada que traemos a la disputa de la organización económica nacional, si el objetivo es superar y no cristalizar la pobreza, entonces la esperanza transformada en fe cristiana será el legado que el Papa Francisco nos habrá dejado a los argentinos".