Al menos veinte personas resultaron heridas y más de cien viviendas fueron destruidas por un sismo de magnitud 6,3 que sacudió ayer la provincia ecuatoriana de Esmeraldas, cerca de la frontera con Colombia.

"Los cables se estremecieron (...) salí como loco y cuando vengo para acá ya vi mi casita caída", lamentó el pescador Andrés Mafare, de 36 años. Cuando caminaba hacia el puerto le sorprendió un relámpago. "¡Boom! Sonó ese rayo (…) y ahí se viene el temblor", contó. Su primera reacción fue correr para buscar a su esposa y sus dos hijos, que resultaron ilesos.

El sismo dejó veinte personas con heridas en la cabeza y otros golpes, además de 135 viviendas afectadas, según el balance más reciente de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos (SNGR). Dos vías y un puente también registraron daños. El presidente Daniel Noboa dispuso la instalación de albergues y la entrega de kits de ayuda humanitaria. "El gobierno está con ustedes, y así vamos a salir adelante", escribió en X el mandatario, quien viajó la víspera para asistir al funeral del papa Francisco en Roma.

En las calles los pobladores transitaban esquivando escombros, otros intentaban remover una pared que se desprendió de un edificio y cayó a la calle. "(Perdí) cosas materiales, tres, cuatro paredes (...) yo sé que las autoridades nos van a ayudar", dice Mafare, habitante de esta provincia pobre y cercada por la violencia del narcotráfico. El terremoto se produjo a 35 kilómetros de profundidad hacia las 06H45 locales (11H45 GMT). Las autoridades descartaron una alerta de tsunami.

El sismo ocurrió a 8,4 kilómetros de la ciudad de Esmeraldas (noroeste), capital de la provincia del mismo nombre, indicó la SNGR en X. En esa localidad y la turística Atacames el servicio eléctrico se está restableciendo paulatinamente.

La empresa estatal Petroecuador suspendió las operaciones de la Refinería Esmeraldas, donde "se han determinado afectaciones en sus unidades". El transporte de crudo se reactivó tras una pausa corta. 

Veinte minutos después del primer temblor, el Instituto Geofísico ecuatoriano reportó otro de magnitud 4,1 en la costera provincia de Guayas, en el suroeste del país, a 86 kilómetros de profundidad. La semana pasada Ecuador recordó el aniversario del terremoto de 2016 que sacudió las costas de Manabí y Esmeraldas. Con una magnitud 7,8, dejó 673 muertos y unos 6.300 heridos y lesionados.