Los trabajadores municipales de Puán tienen un nuevo convenio colectivo de trabajo. El trabajo mancomunado entre el municipio, el gobierno bonaerense y UPCN Provincia, apartó las distancias políticas y encontró un punto de equilibrio tras la catástrofe que vivió la localidad en diciembre de 2023. Sueldos impagos, arcas vacías, un acuerdo salarial inviable y salarios por el piso, fue la herencia del ex intendente radical Facundo Castelli que se dio a la fuga y no entregó el mando.

La solución llegó con acompañamiento económico del gobierno de Axel Kicillof y tuvo como corolario el reciente nuevo Convenio Colectivo de Trabajo que firmó el actual mandatario de Puán y dirigente del PRO, Diego Reyes, con la secretaria general de UPCN Provincia, Fabiola Mosquera.

De esta manera, se acordó un incremento del 74 por ciento en el sueldo básico de la categoría más baja de los trabajadores municipales de Puán, pasando de menos de 270 mil pesos a casi 420 mil. A su vez, este incremento impactará en las jubilaciones. Además, habrá mejoras en los porcentajes adicionales por título secundario y profesional, así como en las licencias por enfermedad.

De parte de UPCN Provincia, el secretario gremial de la organización, Juan Pablo Martín, explicó a Buenos Aires/12 que “la discusión con las autoridades municipales de este signo político comenzó con cautela”. A su juicio, más allá de las diferencias ideológicas, tanto la administración provincial, la municipal y el propio sindicato, comprendieron que la situación heredada tras la salida de Castelli requirió “mucha responsabilidad”.

“Este nuevo acuerdo era necesario porque el CCT anterior no había sido pluralista en su génesis a la vez que había sido irresponsable en comprometer los recursos con los que no contaba la Municipalidad para otorgar un beneficio por antigüedad que se encontraba fuera de contexto, haciendo peligrar el concepto de salario básico de los trabajadores”, detalló Martín.

Sucede que el anterior acuerdo firmado entre Castelli y la Federación de Sindicatos Municipales Bonaerenses, Fesimubo, contempló una cláusula por la que el concepto de antigüedad pasó de un 3 por ciento sobre el sueldo básico a un 5 por ciento. Desde UPCN aseguraron que ningún municipio ni repartición de la provincia de Buenos Aires cuenta con un beneficio de estas características y que siempre la antigüedad no supera el 3 por ciento.

Al respecto, Martín aclaró que su sindicato “no tiene ningún encono con Fesimubo ni otras organizaciones gremiales con las cuales nos separan solamente diferencias a la hora de entender el mejor camino posible para alcanzar conquistas para los trabajadores”. En la misma sintonía, señaló que respeta las acciones que cada organización realiza “de las cuales deben rendir cuentas exclusivamente a sus afiliados quienes validan la gestión de los dirigentes mediante la libre elección sindical”.

Por su parte, Juan Cruz Goñi, secretario general de la Federación en Puán, anunció días atrás que “no van a aceptar que se toque el 5 por ciento de antigüedad porque es un derecho ganado”.

Desde el Ministerio de Trabajo de la provincia, aseguraron a este medio, en relación al tema de la antigüedad, que “si bien existe la reducción del monto, se acrecentarían los básicos y el Ejecutivo Municipal acompañó causales de justificación para hacer esa modificación”.

“Más que nada el estado de pródigo del intendente al momento de la redacción del convenio y tiempo después lo que pasó con la entrega del mando y la apropiación indebida de los fondos municipales”, agregaron desde la cartera que lidera Walter Correa.

Apagar el incendio

“Las partes suscribieron el nuevo CCT en sede de UPCN el día miércoles y ayer por la tarde el Ejecutivo Municipal realizó una presentación solicitando la registración del mismo, que queda pendiente del dictamen de Legales y allí se avanzará”, aseguraron a este medio desde la cartera laboral bonaerense. De aprobarse y registrarse, tanto en el municipio como en UPCN aseguraron que su aplicación será "inmediata".

La posibilidad de arribar a este resultado por parte del sindicato que lidera Mosquera radica en que se convirtió en el gremio con representación mayoritaria en el municipio. Así, junto con Sindicato de Trabajadores de la Municipalidad de Puán (SOEM), encontraron un nuevo punto de equilibrio con Diego Reyes, intendente del PRO, que sucedió a Castelli.

Al momento de asumir, Reyes se encontró con un municipio “quebrado”. Tal como contó este medio en diciembre de 2023, Castelli dejó la Municipalidad tres días antes del traspaso de mando, acto del cuál no participó, en medio de una polémica transferencia de más de 80 millones de pesos desde las cuentas municipales a el partido vecinal que el propio Castelli presidía. 

Como el mismo hizo público días después, presentó un certificado donde aseguró padecer un desequilibrio psiquiátrico.

“En primer lugar, le quiero pedir disculpas a todo el personal municipal por no poder abonar los salarios en tiempo y forma del mes de noviembre, espero que esta situación se solucione rápidamente con la nueva administración de Diego Reyes, al cual le deseo el mayor de los éxitos”, escribió en sus redes Castelli el 7 de diciembre de 2023 bajo el título de “Perdón”.

En ese mismo texto, detalló que, desde el mes de agosto de ese mismo año, el municipio atravesaba un déficit mensual de 100 millones de pesos. Cuatro meses antes, Castelli firmó el CCT con Fesimubo.

Sin una foto de traspaso, comenzó una escalada de conflictividad entre Fesimubo y Reyes por la falta de pago en los haberes municipales, una situación que subsanó el Gobierno provincial con aportes del tesoro. Incluso, Reyes denunció amenazas que involucraron a su familia, y el propio ministro de Gobierno, Carlos Bianco, se solidarizó con el dirigente del PRO.

Desde entonces, tal como explicó Reyes a este diario, los incrementos salariales no fueron directamente al básico y se dieron a partir de sumas no remunerativas que alcanzaron los 150 mil pesos. Según el intendente, no se podía avanzar en una negociación paritaria hasta que no se resuelva la situación del convenio colectivo, puntualmente, el ítem de la antigüedad.

¿Por qué? “Para nosotros, al momento de asumir, no era un problema abonar el 5 por ciento de antigüedad, dado que a si un empleado cumplía 10 años de antigüedad, iba a cobrar 9 años al 3 por ciento y uno al 5 por ciento, pero el problema acá es la sostenibilidad. En 10 años más, a un 5 por ciento más de antigüedad por cada año, incrementaba la antigüedad por encima del propio salario básico. Nosotros pensamos a futuro, más allá de nuestra gestión. Si se dejaba el 5 por ciento eso obligaba a pisar el salario básico, afectando a los propios trabajadores y a los jubilados”, indicó Reyes.

Dentro de Unión por la Patria a nivel local, esperan conocer el detalle del convenio en el Concejo Deliberante. Anahí Rodríguez, quien preside la Comisión de Hacienda en el Legislativo de Puán, sostuvo a Buenos Aires/12 que desde el espacio no conocen el detalle del acuerdo, aunque reconoció que las negociaciones salariales son un asunto de los gremios y el intendente.

De todas maneras, remarcó que los antecedentes de Reyes no son positivos. “Reyes es como Milei”, subrayó. “Hace horas echó a un trabajador que tiene un hijo con discapacidad a punto de operarse, no tiene sensibilidad por nadie”, relató Rodríguez. De todas maneras, valoró toda labor que posibilite "mejorar la calidad de vida de los trabajadores municipales".