Las ventas minoristas durante el fin de semana largo del 8 de diciembre cayeron 5 por ciento en comparación con el consumo registrado en la misma fecha de la temporada pasada, informó la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). Los turistas que circularon por el país fueron 1,4 millones, un número mayor al registrado en 2015, pero la estadía promedio de permanencia fue más baja y el gasto medio diario este año se ubicó en 630 por persona, sólo 28,5 por ciento mayor al del año pasado, cuando la inflación cierra el año cerca del 43 por ciento.
El informe de la CAME indicó que el destino más elegido fue la costa argentina y que la mitad de los turistas eligieron ciudades de la provincia de Buenos Aires o el Litoral para el último fin de semana largo del año, y el último feriado puente, en caso de que el proyecto oficialista para recortar los asuetos sea aprobado en sesiones extraordinarias, de acuerdo a las intenciones del gobierno nacional.
En 2016, los 8 fines de semanas largos --Carnaval, Semana Santa, Día de la Bandera, Día de la Independencia, homenaje a San Martín, Diversidad Cultural, Soberanía Nacional y este Día de la Inmaculada Concepción-- fueron el impulso para que 9,8 millones de argentinos realicen salidas turísticas, que generaron un movimiento económico directo de 18.180 millones para las economías regionales.