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La Sexta sección electoral arroja sobre la mesa una paradoja para el peronismo. Con una fuerte producción agropecuaria de trigo y maíz, en las elecciones de 2023 fue la única región del interior de la provincia de Buenos Aires donde perdió Axel Kicillof. Pero, por otro lado, Unión por la Patria recuperó la conducción de los tres municipios más importantes de la sección, con Bahía Blanca a la cabeza, seguido por Coronel Rosales y Tres Arroyos.
En total, la Sexta se compone de 22 municipios, donde una docena está en manos del peronismo, cinco con la UCR, tres con el PRO y un par están gobernados por vecinalismos. Entre todos, cuentan 298 concejales, de los cuales se renueva la mitad el 7 de septiembre. En esta fecha, los exJuntos ponen en riesgo 81 bancas, el peronismo 55, las fuerzas vecinales 9 y la izquierda solo dos.
Así las cosas, la antigüa coalición entre el radicalismo, el macrismo y la Coalición Cívica, arriesga una fuerte representación seccional que ya se vio esmerilada en octubre de 2023. Sucede que, en las legislativas de 2021, Juntos ganó en 20 de 22 distritos. Sólo perdió en Laprida y Monte Hermoso. Ahora bien, dos años después, apenas se alzó con el triunfo en ocho municipios.
El antecedente electoral inmediato que llevó a Javier Milei a la presidencia, permitió que La Libertad Avanza consiga 19 concejales en once distritos de la Sexta. Su principal logro se materializó se Bahía Blanca, cabecera de la sección, donde capturó cuatro sillas del Concejo Deliberante, aunque las propias internas libertarias que detonaron el equilibrio del espacio. En el concejo, denuncias cruzadas de corrupción dinamitaron el bloque. Y, en términos legislativos, los dos senadores que llegaron a La Plata por la región conformaron un bloque ajeno a La Libertad Avanza junto a Carlos Kikuchi.
Aunque, para padecer de los bahienses, el verdadero golpe de La Libertad Avanza a Bahía provino por dos decisiones. Primero, el Gobierno nacional le quitó la posibilidad de contar con una inversión internacional de 30 mil millones de dólares y miles de puestos de trabajo al trasladar la construcción de una planta de licuefacción de gas a través de YPF. Lo segundo, es que Milei manifestó niveles muy bajos de empatía con la ciudad tras el temporal de diciembre de 2023 y la reciente inundación en marzo de este año.
Con este marco, la sección se apunta en una nueva disputa de cara a la Cámara de Diputados de la provincia. Debe renovar once legisladores, de los cuales seis pertenecen a Juntos, cuatro al peronismo y uno de Alianza Libertad. El solitario es Guillermo Castello, hoy férreo mileísta, que es marplatense pero ingresó por esta región.
Uno por uno en la Sexta
Adolfo Alsina, Adolfo Gonzales Chaves, Bahía Blanca, Benito Juárez, Coronel Dorrego, Coronel Pringles, Coronel Rosales, Coronel Suárez, Daireaux, Guaminí, General Lamadrid, Laprida, Monte Hermoso, Patagones, Pellegrini, Puan, Saavedra, Salliqueló, Tres Arroyos, Tres Lomas, Tornquist y Villarino son los veintidós municipios que integran la Sexta sección.
De los doce intendentes que gobierna el peronismo, siete integran el Movimiento Derecho al Futuro, la fuerza política del gobernador. Bahía Blanca, con más de 335 mil habitantes, Rosales con 70 mil y Tres Arroyos, con casi 63 mil, conjugan más del 60 por ciento de la población de la Sexta. El trío quedó en manos de peronismo a través del mencionado Susbielles, que responde al PJ bonaerense, Rodrigo Aristimuño del MDF, y Pablo Garate del Frente Renovador.
Las tres principales tribus del peronismo tienen la tarea de configurar una estrategia para sostener el sendero de crecimiento que se visualizó en 2023. Más allá de que la tira de la boleta que tuvo a Kicillof perdió frente a Néstor Grindetti por 3 mil votos, de 2021 a 2023, Juntos perdió 22 concejales, el peronismo sumó cinco, el vecinalismo dos y la izquierda ninguno. La diferencia positiva la hizo La Libertad Avanza, que pasó de contar con dos lugares por Avanza Libertad a 19.
Yendo caso por caso, en Adolfo Alsina Javier Andrés logró la reelección. El intendente radical padeció la intromisión libertaria y de cuatro bancas que obtuvo en 2021, pasó a dos en 2023. El desafío para el dirigente será repetir el número y no poner en riesgo el control del concejo. El peronismo, por su lado, solo arriesga dos concejales.
En Patagones, el punto más sureño de la provincia, el peronismo volvió a ganar a través del renovador Ricardo Martino. Allí, el concejo renueva ocho lugares, cuatro para el oficialismo y cuatro de los exJuntos. En esta ocasión, la fuerza libertaria pretende colarse en el reparto de sillas como lo hizo en 2023.
La Sexta cuenta con un cuarteto de distritos con nombres de coroneles. Por el lado de Dorrego, el radicalismo apunta a sostener una hegemonía que entró en duda en 2023 cuando el peronismo ganó en las PASO. Después, no pudo obtener el triunfo en las generales. Cada fuerza se reparte tres bancas de las seis en disputa.
En Pringles, Lisandro Matzkin, inicialmente vecinalista pero ligado al PRO, pretende sostener los cuatro concejales que pone en juego. Los otros tres, en 2021 dos fueron de la izquierda y uno del peronismo. Para 2023, la izquierda no figuró y sí apareció La Libertad Avanza, que buscará sumar lugares.
Por el lado de Rosales, distrito que cuenta con el puerto por donde sale el 70 por ciento de petróleo crudo que se exporta de Vaca Muerta, Aristimuño espera consolidar su triunfo en 2023. Tiene la posibilidad de quitarle más lugares a los exJuntos que ponen en riesgo cinco concejales contra solo dos del peronismo.
En Suárez, donde la fábrica de zapatillas Dass viene de dejar sin trabajo a cientos de bonaerenses por la crisis económica, Ricardo Móccero pretende torcer los magros resultados de 2021 cuando Juntos ganó cinco bancas y el peronismo sólo tres.
Esteban Acerbo, intendente de Daireaux, apunta sostener los tres ediles que pone en juego. Mismo número obtuvo en 2021 y 2023, por lo que no espera tener sorpresas. Diferente es el caso que transita José Nobre Ferreira en Guaminí, porque hace cuatro años el peronismo cayó frente al frente UCR-PRO-CC que se quedó con cuatro concejales contra dos del ex Frente de Todos. Así como le revirtió en 2023, el oficialismo busca el triunfo en septiembre.
No es coronel, pero es general. En Lamadrid, el radical Martín Randazzo mantiene la hegemonía en el municipio. De los seis ediles en juego, arriesga tres, mismo número que el peronismo. Una situación similar mantiene la UCR en Pellegrini, que en las últimas dos elecciones repitió el resultado. Ganó tres concejales y el peronismo dos, por lo que pretende mantener la distribución.
En la Sexta, sólo dos partidos gobernados por el peronismo pasaron a manos de la oposición. Uno es Adolfo Gonzáles Cháves. Allí ganó Lucía Chavez, de la línea radical Evolución que responde a Martín Lousteau. Más allá de la novedad, en 2021 y 2023, su espacio logró tres concejales, mismo registro que el peronismo. El otro es Tres Lomas, pero el número de los últimos dos comicios fue de tres bancas para los ex JxC y dos para el entonces UxP, por lo que el peronismo puede remontar.
Dos referentes potentes del kicillofismo esperan mantener su gobernabilidad en los distritos. Uno es Julio Marini en Benito Juárez y el otro es Alfredo ‘Pichi’ Fisher en Laprida. El primero, pone riego tres de los siete concejales en juego. El segundo, tres de seis. Ambos apuntan a mantener al margen a la ola violeta de su territorio.
En Puan, el paso de mando se dio dentro de Juntos. El radicalismo cayó en medio de un escándalo por falta de fondos y el exintendente Facundo Castelli se fugó. El vencedor llegó del PRO. Diego Reyes hoy tiene que mantener los cuatro concejales que pone en juego mientras que el peronismo se puede reorganizar y ampliar sus dos butacas obtenidas en 2021.
En Saavedra y Villarino, los vecinalismos apuntan a fortalecerse en medio de conflictos económicos. Particularmente, Matías Nebot en Pigüe debió reducir salarios, pero tiene la posibilidad de ampliar los dos concejales que pone en juego. Los ex Juntos la tienen más difícil, porque son tres concejales los que arriesga, mientras que el peronismo solo uno.
Carlos Bevilacqua, con su partido Acción por Villarino, pretende sostener su hegemonía luego de torcer el resultado de 2021 en 2023. Ahora puede crecer, ya que solo pone en disputa dos bancas contra cuatro de los exJuntos y dos del peronismo.
Hay un cuarto distrito que el peronismo recuperó en la sección. De la mano de Ariel Sucurro, Salliqueló está en manos del kicillofismo. En esta ocasión, el productor rural que gobierna el municipio que llego a la fama por el Gasoducto Néstor Kirchner, puede dar vuelta los números de 2021, donde Juntos ganó tres concejales y el peronismo solo dos.
En Tornquist, el oficialismo también espera cambiar el resultado de 2021. El peronismo obtuvo dos sillas en el concejo contra tres de Juntos y una del vecinalismo. Para septiembre, pretenden dar vuelta la tabla y, al menos, repetir los tres concejales obtenidos en 2023.
Entre los grandes logros del peronismo estuvo la recuperación de Tres Arroyos tras décadas de gobierno vecinalista. Garate, dirigente que responde a Sergio Massa, se alzó con la victoria en 2023 y apunta a consolidar su liderazgo en el Concejo Deliberante. De los nueve que se ponen en juego para esta elección, el ahora oficialismo arriesga tres mientras que JxC cuatro. Los otros dos pertenecen al histórico vecinalismo local.
Finalmente, en Monte Hermoso no se esperan sorpresas. El distrito cuyas playas fueron el centro de las fotos en el verano con el paso de Cristina Kirchner, está gobernado Hernán Arranz, dirigente del peronismo y hombre de Alejandro Dichiara. Tanto en 2021 como en 2023, el oficialismo se quedó con tres de las cinco sillas en juego y no imagina un resultado diferente.
La cuestión bahiense
En diciembre de 2023, tras ocho años de gobierno del PRO, Susbielles se hizo con la intendencia de Bahía Blanca. El comienzo no fue fácil. No sólo por la recordada tragedia climática tras la que Milei soltó su famosa “arréglense solos”, sino porque el Concejo Deliberante quedó en manos de La Libertad Avanza.
El concejo bahiense es el único de la sección con 24 bancas. Si se toman los escrutinios definitivos de la Junta Electoral provincial, diez concejales provienen de Juntos por el Cambio, ocho del peronismo y seis de las huestes libertarias. Pero todo detonó desde el principio.
Quien fue candidato a intendente por el mileísmo, Oscar Lieberman, instruyó a la titular del bloque libertario, Martié Gonard, acompañar la desginación de un oficialista al frente del Concejo, tal como se acostumbra en todos los municipios. Pero Gonard lo desoyó y construyó el escenario para ser votada ella misma.
Hace pocos meses, Gonard fue destituida. Mauro Reyes, otro libertario, la reemplazó, pero con apoyo del peronismo. Es por eso que Susbielles tiene enfrente el desafío de fortalecer al peronismo local. En 2021, los exJuntos, ya divididos, lograron siete bancas de las doce en juego. El número es difícil de repetir. Por su lado, el oficialismo solo arriesga tres, pero viene de ganar cinco en 2023, mostrando crecimiento. Así, el intendente tiene serias chances de controlar el órgano legislativo que le resultó esquivo estos dos años.
La Legislatura
Como toda sección electoral, la Sexta también renueva representantes en la Legislatura bonaerense. En esta ocasión, son once diputados. Seis, más de la mitad, ingresaron con la boleta de Juntos por el Cambio cuando Facundo Manes y Diego Santilli disputaron la interna en medio de la pandemia. De la media docena, Emiliano Balbín, Anahí Bilbao y el fallecido Lorenzo Natalí, provienen de la UCR.
Por el lado del PRO, había dos representantes que ahora pertenecen a La Libertad Avanza. Se trata de Abigail Gómez y Fernando Compagnoni, ambos ligados al bullrichisimo. La nómina la completó la bahiense del GEN, Natalia Dziakowski.
Desde el peronismo, son cuatro los lugares en juego. El principal referente es Dichiara, que durante el 2024 presidió la cámara baja. Hombre del PJ bonaerense, arribó al recinto en 2021 junto a Maite Alvado, María Fernanda Bevilacqua de Villarrino y Carlos ‘Cuto’ Moreno de Tres Arroyos.
Finalmente, el onceavo lugar quedó en manos de Guillermo Castello, entonces hombre de José Luis Espert. No reside en la sección porque es marplatense, pero eso no lo privó de acceder a la diputación a través de la nómina de Avanza Libertad. Hoy ya fue absorbido por La Libertad Avanza.
