“Si se le saca plata a los jubilados también se le quita al consumo interno”, advirtió Marcelo Fernández, presidente de la Confederación General Empresaria de la Argentina (Cgera). Además, subrayó que la reducción de 100 mil millones de pesos que supone el recorte de la fórmula de actualización de las jubilaciones, pensiones y de la Asignación Universal por Hijo (AUH) implicará una baja de la recaudación del IVA del orden de los 20 mil millones de pesos. Se calcula que alrededor del 70 por ciento del empleo privado es generado por las pymes, que a su vez destinan la mayor parte de su producción al mercado interno. Es decir que su nivel de actividad depende en buena medida de la marcha del poder adquisitivo.
La Cgera es una de las pocas entidades de carácter empresario que se manifestó en contra de la reforma previsional. “Esta quita –en relación al cambio en la ecuación para actualizar las jubilaciones, entre otros derechos– afectaría al mercado interno porque los veteranos de Malvinas, los jubilados y los beneficiarios de AUH no ponen su dinero en un plazo fijo, lo vuelcan al consumo. ¿Cómo vamos a hacer para suplir ese dinero del consumo si esta ley se aprueba y las estimaciones son correctas? El consumo interno es el motor de la economía argentina y acompaña al empleo”, dijo Fernández.
El dirigente pyme dijo además que “si es verdad que este proyecto disminuye en 100 mil millones de pesos las partidas para jubilaciones y asignaciones, el Estado se pierde de recaudar 20 mil millones de pesos en IVA”. El cálculo supone que todo lo recortado a esos sectores hubiera ido al consumo, que paga en promedio un 21 por ciento de IVA.