La Duma (cámara de diputados) de Rusia aprobó ayer una nueva ley que impone multas onerosas para combatir la venta ilegal y la falsificación de entradas para el Mundial 2018. La multa por la venta ilegal será de entre 20 y 25 veces el valor del ticket y nunca menos de 50 mil rublos (unos 850 dólares). En caso de que el infractor sea un funcionario público el castigo será hasta 30 veces el precio del ticket y no menos de 150 mil rublos (2500 dólares). En el caso de falsificación de entradas o de documentos que permitan recibir boletos para los partidos mundialistas, las multas serán de hasta 70.000 rublos (1200 dólares); 200 mil rublos (3400 dólares) para cargos públicos y de hasta millón y medio (25 mil dólares) para personas jurídicas.