“Time’s Up” (“Se acabó el tiempo”). Bajo esa denominación, más de 300 actrices, directoras, productoras y otras trabajadoras de la industria del cine, la televisión y el teatro norteamericano pusieron en marcha un fondo de asistencia legal para ayudar económicamente a mujeres con menos recursos que ellas a defenderse de los abusos sexuales en el entorno laboral. El lanzamiento del fondo fue anunciado ayer a través de una carta publicada a toda página en los diarios The New York Times y La Opinión, en la que las mujeres del mundo del espectáculo dan su apoyo a sus “hermanas” en sectores menos lucrativos de la economía de Estados Unidos. La campaña también pide a las mujeres que desfilarán el próximo 7 de enero por la alfombra roja de los Premios Globos de Oro que se vistan de negro para generar conciencia sobre el movimiento.
“Queremos alzar las voces, poder y fuerza de las mujeres que trabajan en industrias con salarios bajos, cuya falta de estabilidad financiera las hace vulnerables a altas tasas de violencia y explotación basadas en el género”, dice la carta cuya iniciativa parte del movimiento #MeToo (y sus traducciones en el mundo,#YoTambién; #MoiAussi;#EuTambem) que se viralizó a través de las redes sociales y por medio del cual las mujeres de todo el planeta, celebres y desconocidas, en primera persona, están visibilizando los abusos sexuales; denuncias que cobraron impulso tras las numerosas acusaciones contra el poderoso productor cinematográfico Harvey Weinstein.
La misiva publicada expresa su solidaridad “a cada mujer empleada en agricultura que ha tenido que aguantar los intentos de seducción de su jefe (...), cada inmigrante silenciada por la amenaza de que si habla, revelarán que es indocumentada, y para todas las mujeres sometidas a comportamientos indignos y ofensivos que se supone que deben tolerar para ganarse la vida: estamos con ustedes, las apoyamos”.
Pero además de alzar la voz desde un lugar privilegiado, el apoyo se materializó en el fondo de defensa legal “Time’s Up”, que ya recaudó más de 13 millones de dólares en donaciones de 356 personas, a través de la plataforma Go Fund Me, para que las mujeres con salarios bajos puedan enfrentar las consecuencias que pueden tener denunciar los abusos sexuales.
Además del fondo de asistencia legal, la campaña busca impulsar modificaciones en la legislación para penalizar a las compañías que no tomen medidas contra el acoso sexual persistente.
En el ámbito del espectáculo, la propuesta reivindica la meta de alcanzar la paridad de género para 2020, tal como lo había anunciado Meryl Streep, una de las donantes del fondo, en diciembre pasado durante la Conferencia anual para mujeres de Massachusetts.
El fondo de asistencia será administrado por el Centro Nacional de Derecho de la Mujer, de acuerdo con el sitio web Time’s Up. Según el New York Times, el grupo que moviliza el fondo está impulsado por una coalición informal integrada por numerosos comités centrados en diversas tareas pero sin líderes centrales. Entre las caras más visibles del movimiento se encuentran la productora Shonda Rhimes, la actriz Reese Witherspoon, la directora de Universal Pictures, Donna Langley, y la reconocida abogada, Nina Shaw.
La inicitiva está inspirada por una carta de la Alianza Nacional de Campesinas, una asociación de 700.000 trabajadoras agrícolas que en noviembre escribió a las actrices de Hollywood afectadas por abusos sexuales para expresar su solidaridad con su situación y destacar que muchas trabajadoras del campo la sufren a diario.
Entre las celebridades donantes fundadoras del fondo legal están Meryl Streep, Jennifer Aniston, la actriz Katie McGrath y su marido, el director J.J. Abrams; y el director Steven Spielberg y su esposa, la actriz Kate Capshaw.
También integran el movimiento, que comenzó a reunirse en octubre para canalizar la indignación general que estalló tras el escándalo de Weinstein, Eva Longoria, America Ferrera, Natalie Portman, Ashley Judd, Emma Stone y Kerry Washington.
En tanto, al fondo legal han donado también otras actrices y figuras destacadas como Gwyneth Paltrow, Viola Davis, Ava DuVernay, Alicia Vikander, Amy Poehler, Olivia Munn, Taylor Swift, Jessica Chastain y Jill Soloway, de acuerdo con la revista Variety.