Como cierre de una marcha de unos 200 trabajadores estatales ayer por las calles de Río Gallegos, en Santa Cruz, los manifestantes decidieron prender fuego al ingreso de la residencia oficial de la gobernadora Alicia Kirchner con ramas y cubiertas. Si ya de por sí el hecho es sorprendente, más insólito fue que de la violenta protesta hubieran participado dos legisladores provinciales de Cambiemos, Roxana Reyes y Alberto Lozano, como pudo apreciarse en las fotos que circularon ayer por las redes.