El ajuste en el Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos (SFMyC) no se detiene. Ayer, los trabajadores de los canales Encuentro, Pakapaka y DeporTV denunciaron que se comunicó extraoficialmente el despido de 34 trabajadores de esas señales, entre personal artístico y administrativo. Tal como viene sucediendo en los medios públicos, los trabajadores denunciaron –además– una suerte de “guerra psicológica”, porque si bien se filtró una lista con los nombres de los supuestos despedidos, y algunos de ellos fueron notificados por los directores de los canales y gerentes de cada área, lo cierto es que hasta el cierre de esta edición nadie había recibido un telegrama en el que se le comunicaba formalmente el fin de la relación laboral. Los trabajadores de las señales se encuentran en asamblea permanente, esperando que se inicie una mesa de diálogo con las autoridades de los canales. “Actualmente, las tres señales se encuentran al límite de su funcionalidad por falta de personal, quedando vacías áreas esenciales”, denunciaron los trabajadores en un comunicado, en donde subrayan que consideran “perverso, cruel y arbitrario el accionar del Sistema Federal de Medios y Contenidos Públicos, dirigido por Hernán Lombardi”.
En medio de una ola de despidos, no renovación de contratos, retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas puestas en marcha en los medios públicos en el último mes, la incertidumbre en torno al futuro inmediato de Encuentro, Pakapaka y DeporTV parece contar con bases sólidas. La posibilidad de que los canales culturales y educativos sean parte de un ajuste que termine redundando en un “vaciamiento” de hecho es un peligro que empieza a tomar forma, teniendo en cuenta los últimos acontecimientos que signaron a las señales que desde el año pasado dejaron de pertenecer al Ministerio de Educación para pasar a formar parte de la órbita que maneja Lombardi. El ajuste iniciado en Radio Nacional, Télam y la TV Pública también parece afectar a las tres señales que hasta la gestión de Cambiemos habían pasado a ser parte del zapping cotidiano de los argentinos.
El fantasma del comienzo de un proceso de “vaciamiento” de Encuentro, Pakapaka y DeporTV tiene lógica. A la considerable merma en la producción de contenido propio que se produjo en los últimos dos años, se le suma ahora la que parecería ser una segunda etapa de ajuste. Hay un dato que asoma contundente: de la estructura de 200 personas con la que contaban las tres señales hasta hace un mes, la planta de personal disminuyó en casi un 50 por ciento. La primera sangría se produjo a fines de diciembre, cuando ante la falta de un horizonte fértil para las pantallas un total de 89 trabajadores se acogieron al plan de retiros voluntarios que abrió el SFMyC. En caso de que se efectivice el despido de 34 personas más, la planta de profesionales para abastecer técnica y artísticamente esas señales pasaría a ser de poco más de 70 personas, apenas el 35 por ciento del personal con el que contaba hasta hace un mes. Una situación que, incluso, puede agravarse, considerando que hay contratados cuyo vínculo vence a fines de febrero.
“En diciembre de 2017 el gobierno cerró el departamento de contenidos de la TDA, dejando a 160 trabajadores en la calle. Paralelamente, se redujo a la mitad la planta de trabajadores de los canales Encuentro, Pakapaka y DeporTV mediante retiros voluntarios, a los que se suman el vencimiento de 22 contratos a fines de febrero”, detalla el comunicado. “Los trabajadores de las tres señales –cierra el texto– consideramos perverso, cruel y arbitrario el accionar del Sistema Federal de medios Y contenidos Públicos, dirigido por Hernán Lombardi”. Los trabajadores temen que, tras las versiones, rumores y anticipos informales, finalmente comiencen a llegar hoy los telegramas a los despedidos. En caso de que eso suceda, los delegados están mandatos a convocar a un paro inmediatamente.
La situación de los medios que forman parte del SFMyC es delicada. Se sabe: reducir el funcionamiento de las señales a su mínima expresión, bajo la idea de únicamente mantenerlas al aire a puros “enlatados”, es una manera elegante de “apagarlas”. Una decisión que, además, disminuye el costo político y la repercusión que tendría el gobierno en caso de cerrarlas directamente. Un caso que sirve como antecedente es lo que ocurrió con el por entonces canal Ciudad Abierta (hoy rebautizado Canal de la Ciudad), que Mauricio Macri había anticipado en plena campaña electoral a jefe de gobierno en 2007 que lo iba a cerrar porque tenía “cero rating” y, tras el rechazo público de ciertos sectores, finalmente tuvo que volver sobre sus pasos. A medias: hoy es una señal que, lamentablemente, pocos saben de su existencia.
Los trabajadores de Encuentro, Pakapaka y DeporTV anticiparon que caso de que no se abra una mesa de diálogo con las autoridades y que el plan de despidos se haga efectivo, tanto el área de Videoteca como el de Chequeo técnico de las señales desaparecerían, ya que se quedarían sin personal.