El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, aseguró que está “más que dispuesto” a prorrogar el cese del fuego con la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), vigente hasta el próximo martes, para profundizar el proceso de pacificación en el país. “Estamos más que dispuestos a prorrogar el cese al fuego con el ELN y a renegociar las condiciones de un nuevo cese”, escribió Santos en su cuenta de Twitter.
El texto que publicó el mandatario está acompañado de una fotografía en la que aparece el equipo negociador del gobierno en los diálogos de paz con el ELN que se llevan a cabo en Ecuador desde febrero del año pasado, apoyados por Brasil, Cuba, Chile, Noruega y Venezuela como países garantes.
El mandatario precisó que mañana “viajarán a Quito para reiniciar las negociaciones con el ELN Gustavo Bell, Angelika Rettberg, Socorro Ramírez, los Generales Freddy Padilla y Carlos Rojas, Alberto Fergusson, José Noé Ríos y Alejandro Reyes Lozano”.
El equipo negociador, liderado por Gustavo Bell, se encuentra reunido en la caribeña ciudad de Cartagena con el objetivo de analizar la continuación del cese bilateral del fuego. El cese del fuego bilateral entre el gobierno de Colombia y el ELN fue decidido a fines de septiembre e iniciado el 1 de octubre. Rige hasta el martes próximo, pero la posibilidad de extenderlo estaba contemplada en el acuerdo original.
El pasado 29 de diciembre, el ELN señaló que la mesa de diálogo con el gobierno “no puede ser interrumpida” por el fin del plazo estipulado para este martes, por lo que mantendrá los contactos, ya que, dijo, “no renuncia a la paz”. La mesa de negociación con el ELN afronta en 2018, año de elecciones presidenciales y en el Congreso, el reto de acelerar la dinámica de diálogo para que el proceso de paz llegue a un punto de no retorno y no sea un factor negativo en la campaña política.
El presidente del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Camilo González Posso, sostuvo que en la coyuntura electoral “el fracaso de la búsqueda de un cese del fuego es visto por un sector extremo como un fracaso de la negociación y, por ende, se pide considerar la continuidad de la mesa de Quito”, según consignó el diario bogotano El Tiempo. Ante las diferencias que impidieron que las partes prorrogaran la actual tregua, que termina el martes a la medianoche, la expectativa de las comunidades en los territorios donde se vive el conflicto con el ELN es que se halle una fórmula provisional mientras se pacta una tregua más larga.
Esta semana, tanto el gobierno como el ELN recibieron cartas por parte de unas 186 organizaciones sociales y cerca de 200 intelectuales solicitando que se continúe en ese sentido. Desde algunos sectores puntualizaron que sería conveniente que se prorrogue el cese unas semanas, mientras la mesa de Quito logra diseñar uno que cubra el periodo electoral y satisfaga a las partes, que han objetado el actual por imperfecto.
En paralelo con la negociación sobre el cese del fuego, las delegaciones de paz del ambas partes retomarán el primer punto de seis de la agenda pactada el 30 de marzo de 2016, sobre participación de la sociedad en los diálogos.
Este quedó en el tintero al finalizar el cuarto ciclo de diálogo, en diciembre pasado. Se espera que se definan en este ciclo las vías en que la sociedad pueda hacer llegar su voz a la mesa.
No obstante, resulta difícil la concreción de ese punto sin un cese en el fuego. “Muchos empresarios han dicho que no tiene sentido ir a una mesa cuando pasado mañana pueden estar incluidos en una lista de secuestro o cuando un líder social no sabe qué le pueda esperar,” advirtió González Posso.