Melissa Johnson es una productora de tevé norteamericana que, siguiendo los pasos de su abuela coleccionista de antigüedades, pasa buena parte de su tiempo libre en mercados de pulgas, subastas, ventas de garaje, anticuarios. Rescatando, dicho sea de paso, elegantes juegos de porcelana, dignos de alta sociedad, amén de ponerlos en prístinas condiciones y venderlos. Sin embargo, antes de colgarles el cartelito for sale en su tienda online (llamada Miss Havisham, en honor a la célebre y descentrada solterona de Grandes Esperanzas, de Charles Dickens), Melissa los interviene con ocurrencia, imprimiéndoles deliciosas frases sarcásticas. Logrando así combinación imbatible: la más coqueta delicadeza con la ironía más descarada. “Tazas de té para la dama que dice lo que realmente piensa”, describe Johnson sobre uno de los ítems más celebrados de su catálogo: antiguas tazas de té, sí, con floridos y delicados motivos, pero que en su interior esconden contundentes mensajes como “Amablemente, vete al demonio”, “Haz el favor de morirte”, “Podría envenenarte”, “Dejá de hablar”, “Son tan tedioso”, “Ojalá te ahogues”, entre otras alternativas.    

“Una mujer sabia me dijo en cierta ocasión: ‘Si tenés odio en tu corazón, tenés que dejarlo salir’. Pues, ¿qué mejor manera de hacerlo que con una taza de té ardiente?”, ofrece Johnson sobre su impía oferta, disponible en azul, celeste y amarillo, con platito (también impreso) “y una fuerte dosis de verdad”. “No tuve que esforzarme especialmente para dar con los insultos. Básicamente la inspiración vino de decir lo que pienso, especialmente en estos tiempos…” , cuenta MJ, y aunque reconoce que –en términos generales– pocas han sido las personas que se han ofendido cuando les ha ofrecido un tecito en su hogar, los que no han captado la broma maldita no le hacen mella. “Cuanto más grande me pongo, menos sufro a los tontos”, dice ella, aspirante a convertirse -en sus palabras- en “una Martha Stewart gótica”. Un primor.  

Más en misshavishamscuriosities.com