A un día de cumplir dos años presa, la líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala, publicó una carta abierta en la que denunció que con su detención arbitraria “empezaron una persecución feroz a todo el que piensa diferente”. En la misiva señaló que es víctima “de operaciones del poder judicial y de la prensa” y resaltó que a pesar de la “impotencia” que le generaron estos 729 días encerrada y del “hostigamiento constante”, tanto ella como sus compañeros están “más de pie que nunca”.
“Creen que con esta prisión arbitraria nos destruyeron. Sepan que nos están fortaleciendo”, tituló la diputada del Parlasur al texto en el que pidió a sus compañeros que sigan luchando “para que las necesidades se conviertan en derechos”.
“A medida que pasan los días vamos perdiendo la cuenta de la cantidad de presos políticos, que ya suman más de 20. Presos por querer un mundo mejor, por defender los derechos de los que menos tienen, por enfrentar las políticas de hambre y exclusión que impulsa el gobierno de gerentes de Cambiemos”, manifestó Sala desde la casa de El Carmen, donde cumple la prisión domiciliaria desde fines del año pasado. La dirigente de la Tupac Amaru también se refirió al “ensañamiento” contra algunos dirigentes políticos. Afirmó que el caso del ex canciller Héctor Timerman es uno de los que más le dolió, “especialmente por la miseria humana de los que ocasionaron que le cancelaran la visa, pero mucho más por aquellos que lo festejaron”.
“Mientras tanto, mis compañeros/as y yo, a pesar del hostigamiento constante y las detenciones, estamos más de pie que nunca con nuestros ideales. Creyeron que con esto nos destruían, creyeron que nos iban a quitar la alegría y la dignidad. Y no pudieron. Sepan que solo nos han fortalecido”, resaltó.
En otro apartado, al hacer hincapié en su situación personal, relató que los últimos dos años fueron “muy difíciles” y de “mucha impotencia”. “Los que me conocieron en libertad saben que no hacía más que resolver situaciones de distintos compañeros y a veces de personas que ni siquiera conocía. Y nunca fue para favorecer a Milagro Sala”, agregó.
Luego dijo sentir “rabia” por los saqueos a los centros de salud que había construido su organización, porque brindaban atención gratuita a miles de personas, como así también por las piletas y los polideportivos “que destruyeron o quemaron” . “Eso era para los chicos de los barrios. Sienten tal odio contra los que menos tienen que no les alcanza con haberme privado de la libertad sino que les quitan los derechos más elementales a miles de jujeños”, denunció.
Milagro sala está presa desde enero de 2016; fue arrestada por participar en una protesta contra el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales. Luego, el Ejecutivo provincial armó e inició diversas causas en su contra. Su detención fue declarada arbitraria por el comité especializado en ese tema de Naciones Unidas. Además, la Corte Interamericana de Derechos Humanos reclamó que fuera sacada de la prisión porque estaba en peligro su integridad física y psíquica. Así fue que fue llevada a su casa para cumplir arresto domiciliario, aunque en condiciones especiales impuestas por la provincia.