¿Basura cero?
Recibimos en el Concejo a las autoridades de la Secretaría de Ambiente de la Municipalidad de Rosario, que explicaron las condiciones del nuevo contrato para la disposición final de residuos en el predio de Ricardone.
En ese marco cuestionamos la demora en el envío de la renovación de un contrato que vence a fin de año, y ‑fundamentalmente‑ el incumplimiento de las ordenanzas 8335 (basura cero), 8726 (ordenamiento de recolectores urbanos informales) y 7721 (funcionamiento de centros de recuperación de residuos).
Sostenemos la necesidad de jerarquizar tanto los dispositivos que estas normas han creado (invirtiendo recursos en los mismos), como las políticas de separación en origen, y el trabajo de los cartoneros, que hoy son actores principales en la tarea de reciclado en residuos secos en nuestro municipio, y sin embargo son obviados a la hora de pensar políticas públicas en la materia.
No hay posibilidad de reducir los enormes costos ambientales y económicos que representa el entierro de toneladas de residuos sólidos urbanos, sin avanzar en el procesamiento y reciclado a mayores escalas, que además de generar recursos para las arcas municipales, permita la creación de fuentes de trabajo insertas en dispositivos de gestión social de residuos.
Eduardo Toniolli
Concejal de Rosario, integrante de la Comisión de Servicios Públicos