En aquella emisión en que Crazy Man fue invitado al programa uruguayo Bendita TV ocurrió algo memorable y pequeño, que justamente por pequeño es exactamente memorable. Pasada la primera mitad de la performance de “Diferente”, Crazy va sacándose el blazer a tiro con el beat y arengando, una manga, espalda, otra manga; pero no, porque esa otra manga no quiere escurrirse entre la forrería. El popstar lo resuelve como lo harían y hacen sus ídolas: clava índice al público, exacto timing, con el blazer pendiendo de la manga maldita. No queda claro, y he aquí lo hermoso, si fue quizás uno de esos problemas que en Norteamérica adoran llamar wardrobe malfunctions o si más bien la coreografía original tenía pautado ese suspenso de pestañeo. Crazy se encarga de su imagen, hace su ropa y muchas de sus tapas, y está a punto de editar de manera independiente su cuarto disco, Golpe nocturno, quizás el más bailable de su carrera, que presentará en Buenos Aires en su primer recital en Argentina.
¿Te ves como una sensación viral?
-No sé. Yo empecé subiendo lo que hago a Youtube para documentarlo, nunca lo tomé como otra cosa, no me preocupaba mucho porque fuese estético. Lo que hago es algo no programado. Me gusta la idea de crear cosas con lo que tenés, sin rodeos, que no terminen de tener un objetivo. Lo mismo para los videos: no me importa que haya un buen ángulo ni nada de eso.
¿Qué tanto tenés de crazy y qué tanto tenés de man?
-De crazy tengo todo. No me gusta hacer cosas que no salgan de lo normal, me gusta que todo sea raro. Además, siempre me gustó mucho lo galáctico, así que lo que yo hago es una mezcla de loco con raro con espacial. Y de man también tengo todo (risas).
¿Quiénes te inspiran?
-Cuando empecé me inspiraban Lady Gaga, Rihanna y Nicki Minaj, ese tipo de artistas muy fetiche, extravagantes. Y aunque no estoy metido en el ámbito de las drag queens, Alaska Thvnderfuck me gusta, y también escuché en algún momento a Jeffree Star. Me gusta Dani Umpi, y al principio no entendía bien si él mezclaba la galería de arte con la música, hasta que después empecé a investigar más y entendí que es un súper artista con libros y obras hermosos. Los artistas como Dani son artistas completos, tienen de todo para dar.
¿Cómo nace tu nombre escénico?
-Un día estaba creando canciones y pensé: tengo que tener un nombre artístico. Me puse a jugar con palabras en inglés y así apareció Crazy Man, que es un nombre que ya registré. En algún momento decidí hacer mi música y gracias a mi fuerza de voluntad nació Crazy Man. Digo fuerza de voluntad porque acá en Uruguay, y en mi departamento, Tacuarembó, no hay mucha promoción cultural, y acá no son de escuchar mucho mi estilo de música, que es electropop, entonces es más difícil que se copen hablando de lo que hago. l
Viernes 19 a la medianoche en el 3er UVersario, Club Dorado, Hipólito Yrigoyen 947.